Durante 2011, la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) recibió 59 quejas por las agresiones cometidas contra defensores de derechos en México, y fue necesario que el organismo solicitara en 16 casos a los tres niveles de gobierno que se aplicaran medidas cautelares para activistas y sus familiares ante el riesgo al que están expuestos.
En un comunicado, la CNDH dio a conocer que en su Informe de Actividades 2011 se detalla que en este rubro, "se documentaron violaciones a los derechos a la vida, integridad, seguridad, reunión, circulación, debido proceso, propiedad y libertad de expresión en perjuicio de su trabajo cotidiano".
Señaló que por estos hechos recibió 59 quejas por agresiones cometidas contra defensores de los derechos humanos, "cuya labor es primordial para consolidar una cultura de la legalidad".
Agregó que "con el propósito de prevenir situaciones que dañen la salud física y psicológica de ellos o sus familias" el año pasado solicitó la implementación de medidas cautelares de protección en 16 casos.
Mientras que en este 2012, el pasado 3 de febrero, en el caso de la activista chihuahuense Norma Andrade, solicitó medidas cautelares a la Secretaría de Gobernación "con el fin de garantizar la seguridad e integridad de la víctima y evitar que sufra un nuevo atentado".
La CNDH indicó que en el caso de los defensores de los derechos humanos, "ha dado seguimiento a cada una de las denuncias presentadas, recabando datos con las autoridades involucradas, entrevistándose con los agraviados y verificando que se integren adecuadamente las averiguaciones previas".
Expuso que "es deber de los servidores públicos federales, estatales y municipales brindar atención expedita y profesional a quienes han sido víctimas del delito, además de esclarecer los casos para erradicar la impunidad y fortalecer el Estado de Derecho".
