Casi 140 incendios fueron reportados hoy en Italia, donde fue decretada la alarma roja en 11 ciudades a causa de las altas temperaturas.
El servicio de protección civil confirmó que un incendio obligó a desalojar a decenas de personas a las afueras de la central ciudad de Florencia, donde el termómetro tocó los 40 grados.
En total la protección civil reportó 137 incendios, la mayoría de origen doloso, alimentados por la ola de calor y la sequía que afectan a toda la península.
Escuadras de bomberos, con el auxilo de helicópteros intentaban controlar por la tarde el fuego a las afueras de Florencia.
Sin embargo, las provincias más afectadas eran las sureñas de Salerno y Caserta, donde fueron reportados 16 y 11 incendios, respectivamente.
En la vecina provincia de Avellino, en la que la víspera murió a causa del fuego un hombre del cuerpo forestal, este miércoles resultó herido el chofer de un trailer que quedó atrapado entre las llamas.
Otro vasto incendio obligó a desalojar a decenas de personas en la norteña provincia de Trieste, cerca de la frontera con Eslovenia, donde también el fuego ha devorado decenas de hectáreas de bosque en los últimos días.
En un comunicado, autoridades de protección civil admitieron que debido a la gran cantidad de siniestros no se ha podido enviar helicópteros y avionetas especiales a algunas zonas.
Recordó que la mayor parte de los incendios tiene como origen la mano humana, por lo que pidió a la población cooperar con la autoridad y notificar inmediatamente los siniestros.
La protección civil decretó este miércoles la alarma roja por el calor en las ciudades de Bolonia, Bolzano, Brescia, Florencia, Milán, Perugia, Rieti, Roma, Turín, Verona y Viterbo.
En tanto, el servicio metereológico advirtió que la de este miércoles era la jornada más calurosa del año, sobre todo en las norteñas regiones de Emilia-Romaña, Veneto, Liguria, Lombardia, Friuli y Toscana, donde el termómetro superaba los 40 grados.
Dijo que a partir del próximo fin de semana se prevén aguaceros en Los Alpes, lo que llevará una corriente de aire fresco a la península y hará bajar las temperaturas.