El supuesto espía colombiano Luis Ríos Castaño, reveló que había recibido instrucciones de la inteligencia de las Fuerzas Armadas de su país de recabar información de nexos militares de Nicaragua con Irán, Venezuela y Cuba.
Un video de las declaraciones del colombiano fue divulgado por el ejército de Nicaragua y reveló sus primeros contactos en Medellín con un oficial identificado como “Andrés Díaz Granados” del Comando General de las Fuerzas Armadas y luego conoció al capitán “César Tiques”.
Ríos Castaño con aparente certeza brindó el testimonio de la supuesta relación con oficiales de las Fuerzas Armadas Colombianas y las peripecias que lo empujaron a convertirse “en agente” a cambio de dinero y “dispensas judiciales”.
Supuestamente, la inteligencia militar le pidió ubicar las coordenadas de las principales bases militares, los depósitos de combustible, los sitios de objetivos estratégicos, los misiles tierra aire-SAM7, los tanques de guerra del ejercito de Nicaragua.
Así como, los “vínculos” con la inteligencia cubana, “los nexos” con otros países como Venezuela e Irán y determinar “si existían militares activos” de esas naciones brindando asesoría, precisó.
Además, los planes de modernización de la artillería y la adquisición de repuestos rusos para los helicópteros MI-17, de fabricación soviética e indagar “si existía un conflicto (…) qué respaldo real tiene Nicaragua de esos países” aliados.
“Aparte de las coordenadas de las bases (militares), necesitaban saber el estado operativo, la ubicación de unos depósitos de combustible, proyección estratégica del ejército nicaragüense”, declaró en el video.
“Me preguntaban si había inteligencia cubana operando acá. Referente a Venezuela, tratar de averiguar al máximo”, expresó.
El 12 de julio, Luis Ríos Castaño fue condenado a 16 años de prisión por los delitos de espionaje e intrusión en perjuicio del Estado de Nicaragua.
El piloto Leónidas Castillo y el teniente Amaru Alvarez fueron condenados por un tribunal militar a 17 años de cárcel por colaborar con el “espía” colombiano.
Presuntamente, Colombia compartía la información con Costa Rica y Estados Unidos.
Luis Ríos Castaño dijo que recibía dinero de forma regular a través de transferencias una especie de “salario” porque “me volví un agente” de las Fuerzas Armadas “desde que acepté venir a Nicaragua”.
Es el primer caso de espionaje y condena por este delito en Nicaragua, algo que no ocurrió durante la guerra entre sandinistas y “contras”, estos últimos apoyados por Estados Unidos en los años 80.