Las Águilas, que suman 5 puntos, han ganado seis de los últimos 10 partidos en los que ha recibido a los tapatíos. (EFE)
América quiere mantener el invicto y conseguir su segundo triunfo del torneo Apertura 2012 de la Nueva Liga MX, cuando reciba hoy sábado al Atlas, en uno de los cuatro partidos con los que continúa la cuarta jornada.
La cancha del Estadio Azteca albergará este duelo a las 17:00 horas, y que tendrá a Miguel Ángel Ayala como encargado de aplicar el reglamento.
Los de Coapa lograron salir con un punto de la visita que hicieron el pasado domingo al Atlante, partido en el que fueron capaces de venir de atrás, luego de una desventaja de dos goles en los primeros 45 minutos, lo cual no es de aplaudirse si se toma en cuenta la gran diferencia que hay entre ambos planteles.
Los problemas en el cuadro bajo de los azulcremas se mantienen como una constante, y una muestra de ello fueron los dos goles que recibió, pues en el primero al colombiano Aquivaldo Mosquera le ganan por completo la espalda, y en el segundo Érik Pimentel comete un penal.
En la Sultana del Norte, Tigres quiere reencontrarse con el triunfo frente a un desesperado Querétaro, encuentro que también dará inicio a las 17:00 horas, con arbitraje de Luis Santander.
Por su lado, Pachuca quiere su segunda victoria de la temporada ante un Tijuana que quiere empezar a tomar ritmo, duelo pactado a las 19:00 horas, en el Estadio Hidalgo, con arbitraje de Francisco Chacón.
Finalmente, San Luis está necesitado de conseguir su primera victoria cuando reciba a Monterrey en el Estadio Alfonso Lastras a las 21:00 horas, con arbitraje de Fernando Guerrero.
El cuadro de José Luis Trejo ya demostró que tiene potencial al frente, pero también dejó en claro que a la defensiva tiene muchas dolencias, con un desequilibrio por el que es complicado pensar que puedan trascender.
Rayados ya terminó con el ayuno de goles y triunfos, luego de dar cuenta de Chiapas, partido en el que no fueron brillantes, pero sí muy efectivos, lo que es sin duda el primer paso para recuperar su mejor nivel futbolístico.
