SITUACIÓN: Tras un batazo al jardín central, el corredor que estaba en primera base y salió con el "hit and run", llega a tercera barrido de cabeza, a donde va dirigido el tiro del jardinero. El tercera base bloquea la almohadilla con su pie, al tiempo que se barre el corredor, quien no puede tocar la almohadilla. El defensivo reclama el out, alegando que tiene la facultad del bloqueo de la base. ¿Qué marcará usted como umpire? La respuesta, al final de la columna.
Los Leones de Yucatán, un equipo que ha batallado enormidades en los últimos años, y que han sufrido severas críticas argumentando que el heredero del extinto Gustavo Ricalde no le supo dar continuidad ganadora a los melenudos, fueron el principal negociante con Vaqueros Laguna durante las pasadas reuniones invernales. Curiosamente, los Leones son el único equipo de la liga que, además de los Vaqueros, utiliza el color naranja en su uniforme.
Laguna mandó a la blanca Mérida a Flavio Romero y Roberto Saucedo, recibiendo a cambio al lanzador Salvador Valdez y el segunda base Oswaldo Morejón. Es precisamente el caso del camarero, el que llama la atención, al tratarse de un pelotero mexicano por de más confiable, consistente en su bateo, que ha alcanzado por momentos el status de "estelar" en el beisbol mexicano, tanto en verano como en invierno.
El traer a La Laguna peloteros de renombre se ha convertido ya en una costumbre de la directiva, aunque a veces los aficionados opinan que ya están en el ocaso de sus carreras. Ha habido decepciones grandes como la de Luis Carlos García o Mario Valdez, pero también se le ha sacado jugo a peloteros como Miguel Ojeda, Rafa Castañeda, Emmanuel Valdez, Sergio Omar Gastélum o el propio Saucedo, quienes dieron mucho de sí para el equipo. Eso mismo debe pasar con Morejón.
El yucateco, quien conformaba una sensacional llave de doble play junto al campo corto Luis Borges, tiene 34 años cumplidos, aún dista de ser un veterano, por lo que las expectativas puestas en él son bastante altas. Para muestra, las opiniones vertidas por aficionados en redes sociales, los laguneros conformes, mientras los yucatecos lloraban la partida de uno de los emblemas, ídolos de su escuadra.
Habrá suficiente tiempo para que Morejón demuestre su valía, esperando sea un aporte valioso. Sólo espero que Orlando Sánchez sepa mantener en ascenso la carrera de Diego Madero, quien hizo un trabajo bastante aceptable la campaña anterior, y a pesar de su juventud, se fajó ante la responsabilidad. Esos talentos, bien identificados con el color naranja, no deben dejarse ir, no deben perderse por ningún motivo. Ojo en las semifinales de nuestra Liga Mayor de La Laguna, serán agarrones auténticos.
San Pedro y Gómez, el 1 contra el 2, es de pronóstico reservado, una lucha entre dos equipos plagados de talento y con jóvenes prospectos que aspiran a la LMB. Tlahualilo ante Cuencamé tiene un sabor romántico, de rivalidad pura, no nos los podemos perder. La colonia Vicente Guerrero está de plácemes, ya que uno de sus hijos, el pitcher Federico Castañeda, fue llamado a los Padres de San Diego, vía la regla 5. "Lico" ya ofreció destellos en Omaha, sucursal de los Reales de Kansas, esperamos ahora pueda establecerse y mantenerse sano para buscar un lugar en el equipo grande.
RESPUESTA: La única ocasión en que un defensivo puede bloquear la base o el plato, es cuando ya tiene la pelota en su poder. Si el fildeador bloquea una almohadilla cuando aún no tiene la bola en su guante, como sucedió en esta supuesta oportunidad, el umpire debe decretar interferencia a favor del corredor, que podrá tomar su base. Buen fin de semana, y recuerden disfrutar la vida, hasta que caiga el out 27.
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