Millones. Aseguran que más de 3 mil millones corrieron por los estados de la república, incluyendo Coahuila.
Es evidente que los gastos de campaña se sobrepasaron en forma escandalosa, pública y notoria, por lo que no reconoceremos el triunfo de Enrique Peña Nieto hasta que se agoten todos los recursos para que sea válido ante el Tribunal Federal Electoral, manifestó Jesús González Schmal, excandidato a senador por el Movimiento Progresista
Ante esta situación recalcó que un caso muy presente fue el de la empresa Latin New Word que contrató o sirvió a los priistas para lavar cerca de 56 millones de dólares a fin de traerlo al suelo mexicano y desde ahí financiar el operativo de la compra del voto.
"Con estos recursos se compraron las despensas que se entregaron y las tarjetas de beneficios. El Movimiento Progresista hizo una denuncias ante el Consejo General del Instituto Federal Electoral, en donde se relacionaba a todos los beneficiarios que recibieron despensas a cambio de entregar su voluntad electoral", dijo.
González Schmal destacó que todo este acervo tendrá que ventilarse después del próximo miércoles, puesto que se tiene que demostrar que el Partido Revolucionario Institucional (PRI), utilizó dinero excesivo en la campaña, lo cual podría causar la nulidad del registro del candidato y no se validaría la cantidad de votos emitidos a su favor.
SE MANTENDRÁN CON EL TEMA DE LA DEUDA
Por su parte, Armando Guadiana Tijerina, presidente de la Asociación Claridad y Participación, reveló que pese a los resultados de la elección presidencial, así como las de diputados y senadores, se continuará trabajando con el tema de la deuda del estado de Coahuila.
"Seguiremos en la lucha, pues sabemos que algunas televisoras propiciaron que Enrique Peña Nieto ganara las elecciones; además las reglas que estableció el Tribunal Federal Electoral y las sanciones del Instituto Federal Electoral, aún no sabemos dónde quedaron", indicó.
Por otro lado, opinó que el candidato presidencial, ni siquiera debió haber estado en la contienda electoral porque había denuncias graves incluso que se conocían a nivel internacional.
Ante esta situación recordó que entre las quejas presentadas ante el IFE en México eran con respecto a los gastos de espectaculares de la campaña del candidato tricolor, aparte acusaciones en contra del PRI sobre más de 702 millones de pesos depositados y entregados, tanto a coordinadores, como a gente operadora del partido mencionado.
Asimismo reveló que la izquierda presentó otra acusación en torno a las tarjetas otorgadas por una cadena comercial con valor de mil pesos, mismas que se enviaron a diferentes hogares para que se votara por EPN, con un equivalente de mil millones de pesos.
