Elementos de la Fiscalía Especializada contra la Delincuencia Organizada (FECDO) se enfrentaron con dos presuntos integrantes del grupo delictivo Los Zetas, quienes fueron detenidos uno de ellos herido.
Los primeros reportes a los cuerpos policíacos señalaron que un grupo de hombres armados que se desplazaba a bordo de un taxi habría pretendido secuestrar a una persona, luego de una persecución en la que hubo disparos de armas de fuego.
Sin embargo, más tarde la Policía Municipal confirmó que en realidad se trató de un enfrentamiento entre agentes y presuntos delincuentes.
Según la información de los uniformados, los policías de la fiscalía estaban encubiertos y realizaban investigaciones al utilizar un vehículo de alquiler.
Especificaron que ellos se desplazaban sobre la calle Oriente, en las inmediaciones del mercado Soconusco, al sur de la ciudad y en el sitio marcaron el alto a una camioneta Ford Lobo, con placas de circulación 71192, que en vez de detenerse aumentó su velocidad.
Según testigos, el conductor de la camioneta sacó una pistola calibre nueve milímetros con la que realizó disparos contra los agentes, quienes repelieron la agresión e iniciaron una persecución en la unidad del servicio público.
Cuadras más adelante, a la altura de la Quinta Avenida Sur, los policías dispararon hacia las llantas de la Ford Lobo y como consecuencia de ello se impactó contra un camión Ram-4000 con placas de circulación XV-92531 de Veracruz.
Los presuntos delincuentes decidieron rendirse luego de que el conductor de la camioneta, Iván Alvarado Torres, de 27 años de edad, originario de Coatzacoalcos, Veracruz, recibió un impacto en la pierna derecha.
En tanto su acompañante, quien se identificó como Tomás Aguilar Torres, de 17 años, resultó ileso.
Ambos fueron detenidos y trasladados a las instalaciones de la FECDO, al sur de la ciudad, donde permanecen bajo investigación por el delito de violación a la Ley Federal de Armas de Fuego y Explosivos, y lo que le resulte.
De acuerdo a la información de los uniformados, los detenidos reconocieron que pertenecen a la banda criminal Los Zetas.
En el lugar de los hechos se montó un operativo en el que intervinieron elementos del Ejército Mexicano, Policía Estatal Preventiva, Municipal, y otras corporaciones.
Además se presentaron agentes del Ministerio Público y de Servicios Periciales, quienes iniciaron las investigaciones y lograron encontrar dos ojivas de arma nueve milímetros, así como tres casquillos de fusil AR-15.