Se sacan un once

Patricia Arriaga había ido al teatro. No recuerda bien la obra, pero esa fue la primera vez que vio a Juan Carlos Barreto. La próxima ocasión sería para ofrecerle participar en su producción XY, para quien el actor cobraría menos de tres mil pesos por llamado.

"Cuando lees un guión como el de XY y ves un papel como el de Artemio Miranda casi pagas por hacerlo. No hay mayor motivación que formar parte de algo tan grande y exitoso", explica.

La serie sería la más exitosa de 2011, tendría tres nominaciones a la Ninfa de Oro, premio a lo mejor de la pantalla chica mundial, y alcanzaría su tercera temporada, todo de la mano de una televisora pública.

Damayanti Quintanar, actriz de Pacientes, piensa similar a Barreto y se involucró en el proyecto sacrificando su ingreso.

"No tengo problema en hacer una serie del Once si cobraré lo mínimo. Cuando te das cuenta del tipo de producciones que hace en canal, sabes que tienes la garantía de calidad. Cuando empiezas a leer el guión de Pacientes hay un momento en el que piensas que sin problema lo harías gratis", expresó la joven.

Las estrellas de la pantalla chica cobran en promedio cinco mil pesos por día de trabajo, más los que tienen la conocida exclusividad, que en algunos casos llega a los 200 mil pesos mensuales, lo que explica los elencos estelares que conforman las producciones de Canal 11.

 EXPERIMENTAR, LA CLAVE

Fue el cineasta Fernando Sariñana quien impulsó la modalidad cuando fue director de Once TV.

"Se hacían cosas como Fonda Susilla o El Diván de Valentina, que como ficciones tenían esa manufactura, realizadas por grandes actores y directores, pero empezamos a probar con guiones de otros géneros y con otros tipos de encuadres que dieran profundidad a la historia. El resultado se ve ahora y creo que valió la pena experimentar", señala Sariñana.

No había ningún impedimento legal para lograr proyectos propios, de hecho, se encontraron las formas de llevar recursos a la empresa sin generar polémica al tratarse de una televisión estatal.

"Como toda empresa pública tienes que rendir cuentas, ya que dependes de un presupuesto público, así que encontramos la forma de coproducir y aportar algo a esta televisión mexicana, dejando a la televisora su inversión inicial, que muchas veces se reduce al material, uso de infraestructura, foros y el nombre", señala el director.

Patrocinadores que nunca había tenido el canal empezaron a mirar la pantalla del Once, había actores dispuestos a trabajar en sus proyectos y sólo faltaban historias por contar.

Una de ellas es la de guionista de Pacientes, Silvia Pasternac, quien de cara a la grabación de la segunda temporada habla del éxito de la continuidad.

"Son historias profundas, con cierto realismo, que al final de cuentas encuentran su nicho en el público. No creo que haya alguna receta mágica, sólo desarrollar bien los personajes, sus vidas, y cómo tejerlas con las de los demás", explica la escritora y traductora.

Imitan modelos de televisión europea

Producir Soy tu Fan, de Canana y Ana Claudia Talancón, costó alrededor de millón y medio por capítulo, pero XY o Bienes Raíces no llegaba ni a 200 mil en sus primeras temporadas, por lo que su trascendencia era cuestionable, pero alcanzó incluso niveles de exportación.

"XY ya fue comparada en Europa y algunos países de América Latina, lo que te habla de la proyección de la serie. Todo esto es resultado del trabajo en equipo", comenta Arriaga, quien revela otra parte del secreto de su éxito.

"Al principio fue mucho trabajo para conseguir la escenografía o vestuario, y es ahí donde la labor de la producción toma relevancia, porque conseguir los trajes o los autos no es tarea fácil, nos prestaban las locaciones incluso.

"A veces eran de los mismos actores o de gente del canal, y había que pedir de favor a los diseñadores de interiores o muebles que trabajaran con nosotros, pero cuando empezamos la segunda temporada todo fue más fácil, teníamos hasta opciones, pero fuimos fieles con quienes nos dieron la confianza... Cuando algo funciona, el programa se vende solo", expresa la productora.

El formato de la cadena es como el parecido a la de las televisoras públicas de diferentes países: la BBC, de Reino Unido; Televisión Española o Telefé, en Argentina, que producen conceptos con calidad de exportación como Sherlock Holmes o la histórica Cuéntame Cómo Pasó, una de las tres series más longevas de la Madre Patria.

"Es lo que de alguna manera buscamos: generar una industria para exportarlas a nivel internacional y lo logramos poco a poco. México es un gran exportador de telenovelas porque aquí, de alguna manera, se crearon en el continente, pero nosotros cada años vamos a Cannes o Nueva York a ofrecer nuestros productos, muchos de ellos premiados a nivel internacional. La diferencia entre nuestras series y una de la BBC es el costo; yo creo que no llegamos ni a la décima parte de presupuesto", finalizó Arriaga.