Sin garra
Garra, pundonor, espíritu. Esos ingredientes que suelen caracterizar a Pumas se extraviaron ayer domingo en Ciudad Universitaria. La derrota por 2-0 ante Puebla significó uno de los peores partidos de los felinos, pues carecieron de intensidad, de posesión de balón, apenas crearon una oportunidad clara de gol y sufrieron la expulsión del defensa Marco Palacios.
Los abucheos del pueblo auriazul sirvieron para recriminar a un equipo que perdió el rugido, al sumar cuatro partidos sin ganar en el certamen y que recibió su primer revés en casa desde octubre de 2011.
"El equipo no mostró ni el corazón ni la garra que le caracteriza, porque a veces el futbol no te da, pero la mentalidad y el carácter deben estar en nosotros siempre", lamentó Efraín Velarde.
La portería rival se le ha cerrado a los pupilos de Guillermo Vázquez, que suman sólo dos tantos en los últimos cuatro duelos. Sus delanteros parecen no funcionar, su defensa es vulnerada con facilidad (han aceptado seis dianas) y esto contribuye al penoso lugar 15 al que resbaló ayer la escuadra universitaria.
La debacle de Pumas se gestó apenas iniciado el cotejo. Cinco minutos marcaba el cronómetro cuando Luis Ángel Landín recibió un pase por el centro de Luis García, que lo dejó mano a mano con el portero Alejandro Palacios, a quien burló para festejar el 1-0.
"Se trabajó en la semana para sacar los tres puntos aquí, el equipo funcionó desde el principio y ahora debemos seguir con triunfos", destacó Landín, cuyo conjunto sumó tres partidos en fila sin perder.
La Franja dominó desde la batalla y se lanzó al frente. Pumas, con David Cabrera y Juan Carlos Cacho en la banca y que dio la titularidad al joven delantero Eduardo Herrera, sufrió para retener el balón en medio campo y para generar jugadas ofensivas.
Para la segunda parte, el técnico auriazul, Guillermo Vázquez, ingresó a Cacho e Izazola en la delantera y a Cabrera para intentar recuperar el balón. Fue inútil. Todo se complicó aún más tras la expulsión por doble amarilla de Marco Antonio Palacios (63').
Cuatro minutos después, la inoperancia de Pumas sirvió de cómplice a los poblanos, que coronaron su dominio con el 2-0 en los botines de Luis García.