Santos Laguna está adoleciendo de errores en ya varios factores que lo dejan en el lugar diez de la tabla y con una afición no muy contenta por el desempeño del equipo. Benjamín Galindo ha sufrido para tener un once ideal, pues no ha sabido suplir con calidad las bajas de Guty Estrada y Christian Suárez. Ahora se suma la de Felipe Baloy por lesión y el problema seguirá siendo el mismo. No se contrató a un quinto extranjero porque se declaró que el equipo estaba completo. Pero en la práctica vemos que no es así. En el segundo tiempo contra Jaguares se tuvo que echar mano de los jóvenes Alonso Escoboza y del forzado debut de Jesús Joya porque simplemente no hay más en la banca. Cándido Ramírez jugó con la Sub 20, en uno de esos ya acostumbrados castigos por los que han pasado titulares santistas, en donde desconozco resultados tangibles.
Con la ausencia de Baloy es posible que se extrañe el lujo de no renovar a Santiago Hoyos a pesar de tenerlo entrenando en la ciudad y que contaba con contrato, algo extracancha debió pasar, porque de otro modo no entiendo la decisión.
Aunque Santos lo intentó ante Jaguares, el resultado lo deja mal parado. A Jaguares tienes que ganarle en casa sí o sí. Más cuando América exhibió a los Guerreros la semana anterior y era la gran oportunidad para al menos reivindicarse por una semana. Que Lugo falló una clarísima, es cierto. Que Oribe otra. Que el equipo no salió conectado, que no hubo contundencia. El futbol es así y los resultados a veces no se dan. Pero al menos un equipo, como local, tiene que dejar todo en la cancha y no me pareció que Santos lo hiciera así. Antes, Oswaldo atajó un gol casi cantado de los felinos y si se me apura un poco, Jaguares no se llevó la victoria nada más porque Oswaldo realizó con creces su trabajo.
Algo tiene que cambiar Benjamín Galindo y ese algo tiene que ser un movimiento de fondo. Contra Jaguares su jugó al pelotazo, a ver qué pasaba arriba. A ver qué podía hacer Oribe, qué Darwin con su velocidad, a ver qué genialidad se le ocurría a Ludueña. Y como estas tres cosas pasan seguido, se esperó la jugada milagrosa que por supuesto nunca llegó.
Pero Santos debe tener una idea futbolística. Jugar a algo, saberse mover, conocer sus traslados y eso no parece visible en el equipo campeón. Es tiempo de modificar la estrategia y de hacerlo ya, pues de lo contrario Santos Laguna seguirá seriamente batallando.
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