Será Daniel Ludueña uno de aquellos jugadores históricos que recordaremos en futuras charlas futboleras cuando de Santos Laguna estemos hablando. Muy importante fue el famoso "Hachita" en la modernidad del club, pues fue actor principal de tres importantes eventos de los Guerreros.
Cuando en el 2006 llegó para salvar al equipo de la candente quema del descenso, lo hizo acompañado de otros grandes como Oswaldo Sánchez, Matías Vuoso y Juan Pablo Rodríguez. Tantas contrataciones fueron tan grandes que se pudo perder la perspectiva de que llegaba el 10 más talentoso del futbol mexicano, cosa que demostró con bellos ejemplos durante su estadía en Santos. Jugadores como Ludueña hay pocos en el futbol mundial. El creativo, el artista, el de la visión, el elegante. Goleador, pasador, siempre festejó sus goles para Santos con seria euforia, como si algo impresionante acabara de suceder. Goles de Ludueña. Goles del "Hachita". Cuántos hay, cuántos hemos visto, cuántos festejado. Un partido no estaba perdido si Ludueña seguía en el campo, aunque no hubiera pesado en tal, cualquier pincelada podía sacar de su excelente pegada para terminar en la red.
Fue de los que salvó a Santos del descenso en el 2007. Santos fue campeón en el 2008 con su gol. Santos fue campeón en el 2012 ¡también con su gol! Gran lector de liguillas, sabe cómo jugarlas, cómo se ganan, a medir tiempos. Ludueña deja una marca importante en el corazón de la afición por todo lo que significó para su equipo, un futuro y seguro integrante de los Guerreros de Honor que adornan el estadio.
Su salida es inesperada, más cuando fue el único (él y Oswaldo) que dio la cara por el equipo en el pasado torneo. Muy criticado por un sector de la prensa que tiene influencia sobre otro sector de la tribuna, se le exigía injustamente a un artista las funciones de un obrero, cosa equivocada. Crear, armar, ver, patear, distribuir, abrir, generar y todavía bajar a recuperar balones suena a empresa hercúlea (y no porque Hérculez Gómez sí tenga que hacerlo, el adjetivo es mera coincidencia) y de lograrlo Daniel Ludueña sería un jugador fuera de serie. El equipo lo extrañará. La afición también. Por su entrega, amor a la camiseta, a la Comarca Lagunera y por sus espectaculares goles, gracias "Hachita" Ludueña y hasta pronto.
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