Sufren fieles por caos el Parque Bicentenario

Por: Ruth Meza.

Cansados, insolados y muy molestos, integrantes de familias enteras tuvieron que regresarse del Parque Bicentenario porque no sólo no les respetaron los lugares que se les dio para asistir a la misa del Sumo Pontífice, sino que hasta fueron atendidos de manera despótica por los organizadores, según denunciaron.

Familias enteras provenientes de Coahuila, Chiapas, Veracruz, Jalisco, Nuevo León y otros estados de la República que vinieron a León a ver al Papa, tuvieron que regresarse sin hacerlo.

Yessica Dávalos, de Guadalajara, decidió junto con sus familiares darse la media vuelta y regresarse sin entrar a la misa.

La zona que le tocó era la E, pero se sorprendieron cuando arribaron a las 3 de la mañana y se les informó que ya estaba lleno.

“Madrugamos, caminamos más de 6 kilómetros, esperamos bajo el solazo y ahora nos dicen que no podemos entrar (…) Tienen una organización pésima”.

Otro ejemplo de desorganización es que se instalaron 200 baños afuera de la Expo, donde no había feligreses.

Lucía Alcaraz fue a uno de esos baños, y cuando regresó, ya no la dejaron pasar a su lugar.

Casos como el de Lucía Alcaraz se vieron muchos y en todos ellos, las personas que acudieron llenos de fe, tuvieron que regresar molestos y desilusionados.

“No es posible que tengamos que caminar hasta allá para ir a los baños. Y luego los amontonaron todos hasta allá (en el cerro); allá yo no voy a ir, más tardo en llegar que en que ya me ganó. Está muy mal organizado esto”, se quejó Camila Patiño, visitante de Jalisco.

Se salen de la misa

En los primeros minutos de la misa que ofició ayer el Papa, varios de los asistentes ubicados en la zona más alejada se salieron molestos.

Alrededor de las 10 de la mañana, algunas personas se empezaron a retirar.

Es el caso de la familia Hernández, originarios de Cuernavaca, quienes tenían pase para la zona E, pero según contaron, no les reconocieron el pase y simplemente los echaron.

En el lugar que les asignaron no pudieron ver ni escuchar al Papa.

“No pusieron ni un anuncio para saber dónde eran las zonas, venimos desde Cuernavaca ¿para que nos hicieran esto?, estuvo muy mal organizado, qué mal se vieron”, dijo Ana Rosa Hernández.

Otra familia que también se salió llegó de Guadalajara; trajeron a una tía de Tijuana, a otras de Torreón y hasta de Chiapas; todas se fueron.

“Ya nos vamos, no es posible que no nos hayan dejado ver nada, no se escucha, no respetaron los lugares, los baños están bien lejos, preferimos aguantarnos, luego dijeron que no podíamos traer sombrillas y aquí adentro sí dejan vender, ya nos vamos, está muy mal” contó Jessica Dávalos Aceves de 23 años.

“Muy mala organización, según nos dieron boletos para la zona E, y no nos dejaron entrar, les quedó muy grande este evento”, dijo Angélica Ramos, de León.