Presión. En los campamentos aseguran se les quiere amedrentar.
"Tenemos que defendernos, exigir nuestros derechos, está de por medio el bienestar y la seguridad de las familias de este ejido", comentaba la gente en los campamentos levantados en los accesos de la mina La Platosa.
"La situación está muy difícil para todos", comentan algunos por el campamento, "tenemos aquí hasta a nuestros hijos y personas mayores" pero no podemos quedarnos de brazos cruzados y permitir que las empresas sigan abusando de la gente".
Asustados, pero con valor decidieron no tomar acciones y no evitarles el paso, "lo principal es velar por la integridad de nuestra gente", comentó el delegado del Sindicato de Trabajadores Mineros, Víctor Alvarado Vallejo.
Asegura que ahora, aunado a la impotencia de no recibir soluciones, se encuentra el miedo, de que se tomen medidas en su contra y el conflicto pase a mayores, aunque indicaron que seguirán defendiendo sus derechos.