SALIENDO DE UN APURO
¿Tiene qué hacer un trabajo sucio de pintura y no encuentra esos guantes de plástico que acaba de comprar? No se preocupe, vaya a la cocina y tome dos bolsas de plástico un poco amplias. Debe tener de donde escoger, pues siempre tendemos a guardarlas. Póngase una en cada mano y sujételas de sus muñecas con una liga de hule. Aunque el movimiento quede un poco restringido, tendrá usted bastante libertad para mover sus manos dentro de ellas. Cuando termine su trabajo tírelas a la basura.
ARCHIVANDO FOTOS
No guarde las fotos de familia como sea. Busque una caja o cofre apropiado y colóquelas en hileras, de acuerdo con su tamaño, poniendo abajo por su respectivo orden, las más viejas. En esta forma podrá encontrar siempre las que quiere ver, sin tener que buscar por todas partes. Al mismo tiempo pasará muchos momentos gratos sacándolas todas y viendo los cambios que el tiempo ha efectuado en sus seres queridos.
AZULEJOS SIEMPRE RELUCIENTES
Si todas las señoras que se quejan de que los azulejos se ven muy opacos y ennegrecidos en partes, y buscan la manera de limpiarlos y devolverles su original aspecto, tuvieran la precaución de limpiar esas paredes cada vez que han usado la regadera, usando una barra de detergente (no jabón) no tendrían este problema ni se verían obligadas a trabajar tanto para limpiarlas de esa capa de jabón acumulada, que también produce las manchas de moho.
PONGA FRAGANCIA EN SU ASPIRADORA
Cuando ya le quede sólo una o dos gotas de fragancia o cualquier otra loción en el frasco, póngalas en una toalla facial desechable y colóquela junto a la bolsa. Déjela allí hasta que se le acabe completamente el aroma. Mientras éste dura, disfrutará usted de él cada vez que aspire.
MANCHAS EN MESAS FINAS
Si alguna vez encuentra que hay en una de sus mesas con fina cubierta un aro de humedad como resultado del descuido de alguien que puso encima un vaso mojado, frote la parte manchada con un poco de mayonesa todos los días hasta que desaparezca el desperfecto de la brillante superficie. Tenga paciencia, no tardará mucho tiempo.
PARA SUS BOTAS
Una manera fácil y barata de guardar las botas si no tiene el artefacto especial para este fin, es colocar una bolsa limpia de plástico dentro de cada bota hasta los tobillos. Llene la bolsa con papel periódico hasta que las botas tengan la forma deseada, después cierre la bolsa con una banda de hule, la bolsa de plástico mantendrá las botas limpias por dentro.
EL PLÁSTICO Y LOS NIÑOS
Si es madre de niños pequeños, debe preocuparse por su seguridad. Cuando guarde bolsas de plástico que le dan en los supermercados, para usarlas para tirar basura, haga un nudo en el extremo abierto de la bolsa por si su pequeño encuentra una de ellas, no pueda meter su cabeza en la bolsa.