LIMPIANDO LA PLANCHA
Use un pequeño trozo de fibra de acero y frote suavemente el fondo de la plancha. Tome luego un paño limpio mojado y limpie bien las partículas de fibra. Luego seque con otro paño limpio. Caliente la plancha con temperatura baja y colóquela sobre un pedazo de papel encerado sobre la tabla de planchar. Pase por él varias veces la plancha y luego planche una toalla vieja o cualquier trapo. Esto quitará cualquier residuo de cera que hubiera podido quedar en la plancha, que quedará completamente tersa. Este procedimiento, por supuesto, no es para planchas con recubrimiento especial de teflón.
HASTA LA ÚLTIMA PARTÍCULA
Use todo el carmín labial que trae su tubo; no deje ni una partícula. No están los tiempos para desperdiciar nada. Casi todas las mujeres tiran el tubo porque ya el carmín ha quedado al ras del casquillo y no lo pueden pasar por sus labios. No haga usted lo mismo; compre un pincel y úselo para aplicarlo. De este modo podrá consumir hasta la última partícula, con la ventaja de que podrá delinear muy bien sus labios.
PASTEL FRESCO
Cuando se va a cortar unas cuantas rebanadas de un pastel recién hecho, corte las rebanadas del centro del pastel, después una las dos mitades nuevamente. El pastel se mantendrá fresco durante mucho más tiempo.
TAPAS SIN TARROS
Casi siempre se nos juntan tapas de diversos tamaños que no tienen ya el correspondiente tarro. Como a menudo sucede, no se sabe qué hacer con ellas y van a la basura. Sin embargo, si coloca usted una al lado de su estufa cuando esté guisando, le será muy útil para colocar en ella la cuchara con que está agitando la preparación que está en la lumbre. Hay veces en que se necesitan varias y qué mejor forma de aprovechar esas tapas huérfanas. Si no quiere tener el trabajo de lavarlas, arrójelas a la basura, pero cuando las haya usado un poco en la forma indicada.
PARA SUS ENREDADERAS
Si no tiene debidamente acondicionado el lugar en donde se encuentran sembradas sus enredaderas, de modo que se puedan sujetar las ramas caídas, vaya a su clóset y saque unos ganchos de alambre que no esté usando. Casi siempre parece haber exceso de ellos en todas las casas y ésta es una buena forma de aprovecharlos. Dóblelos en forma de rombo, enderece el ganchito e instálelos como si fuera un enrejado especial.
¡CÚBRALAS!
Cuando guarde utensilios de madera con mango largo, espátulas, cucharas, etc. en una lata decorada o algún otro recipiente similar, cubra todo con una bolsa de plástico transparente. Pueden verse y también permanecerán limpios, porque no usa cada uno todos los días. Ponga también pequeñas bolsas de plástico transparentes sobre el salero, el pimentero, azucarera y botella de aceite para ensaladas que estén cerca de la estufa. Evitará que se llenen de grasa y de polvo.
