Tuvieron que pasar 10 años para que Toluca nuevamente iniciara un torneo con cuatro victorias consecutivas. (jammedia)
Tuvieron que pasar 10 años para que Toluca nuevamente iniciara un torneo con cuatro victorias consecutivas. Con el triunfo el fin de semana ante Pumas (2-1), los Diablos Rojos cosecharon su cuarto triunfo que le permitió mantenerse en el liderato de la tabla general tras cosechar 12 puntos en igual número de unidades disputadas.
Antes del actual torneo, la última vez fue en el Apertura 2002. En aquella ocasión, dio cuenta de los Rayos del Necaxa (3-0), los Potros del Atlante (3-2), los Monarcas Morelia (4-1) y los Pumas de la Universidad (4-1). En la jornada cinco igualó con los Tiburones Rojos del Veracruz, y fue en la seis cuando sufrió su primer descalabro siendo Monterrey los victimarios.
El buen inicio del torneo le alcanzó para calificar sin problemas a la Liguilla del certamen, incluso, consiguió el campeonato tras dar cuenta en la final de Morelia. Dicha fase final se recuerda por los problemas que tuvo el entonces presidente de los escarlatas, Rafael Lebrija, con el técnico Wilson Graniolatti que obligaron al uruguayo a dejar el timón del equipo tras ganar los Cuartos de Final. Alberto Jorge los llevó al título.
En la actual certamen la directiva, cansada de no calificar en las más recientes Liguillas, optó por regresar a una de las fórmulas que le funcionó en el pasado: la contratación de Enrique Meza, quien llevó a los Diablos a tres campeonatos y, hasta el momento, “El Ojitos" ha respondido a las expectativas.
El arranque de campaña ha sido prometedor para los choriceros, aunque el campeonato es joven y todavía pueden pasar muchas cosas.