EL fracaso que está resultando el horrible principio de Albert Pujols con Angelinos después de darle un contrato de 240 millones de dólares por 10 años va a evitar muy posiblemente el gran contrato que Josh Hamilton va a buscar para el invierno después que hasta ahora está teniendo una temporada de triple corona.
Se está demostrando que los contratos de tanto dinero, pero sobre todo de tantos años, están fracasando totalmente. Alex Rodríguez, por ejemplo, está luciendo como un jugador que va hacia abajo de la colina, un jiterito en lugar del jonronero que era, mientras Carl Crawford todavía no puede jugar un solo partido de este año con Boston y está ganando 240 millones de dólares por un montón de años. Los mismos Medias Rojas no le pagan los 250 millones de dólares a Adrián González por dar sencillos y dobles, sino para conectar jonrones y hasta ahora solamente lleva dos. También el pitcher Cliff Lee se le lastimó al Filis de Filadelfia por un tiempo mientras CC Sabathia no está pitcheando de acuerdo al sueldo que tiene de millones de dólares. Pujols entró al juego del miércoles con un promedio de .212 con dos jonrones y 15 empujadas con la directiva cesando al coach de bateo Mickey Hatcher.
Josh Hamilton es posiblemente el jugador más completo que hay en el beisbol actual ya que además de su poder que le dio una noche de cuatro jonrones en Baltimore, es un gran defensivo, con brazo potente y corre bien las bases.
Es el mismo Josh Hamilton que puso su soberbia exhibición en el Derby de Jonrones antes del Juego de Estrellas del 2008 en el último año del Yanqui Stadium II. Aunque al final no ganó ese Derby, su primera ronda es la más impresionante en la historia de esos nuevos eventos. Se cansó al dar una tonelada de jonrones de más de 400 pies cada uno.
Quedaría como anillo al dedo para el nuevo Yanqui Stadium, pero los hijos del jefe Steinbrenner han dicho que tienen una nómina demasiado alta. Entre Alex, CC y Teixeira tienen agotados los billetes del equipo. Teixeira tiene contrato de 180 millones de dólares hasta el 2016 y Sabathia uno de 182 millones hasta el mismo año. El de Alex de 275 millones es hasta el 2017.
Podría resultar en el primer asilo para deportistas supermillonarios.
La terrible verdad es que ninguno de todos estos jugadores con contratos millonarios por tantos años valen lo que ganan.
El futuro está, como antes, en los prospectos de las sucursales y la era de los grandes contratos por tantos años podría haber acabado con Pujols. Están matando a la gallina de los huevos de oro.
