La Unión Europea (UE) reiteró hoy su rechazo a la pena de muerte y denunció el riesgo de su aplicación en el caso de un fallo de juicio, en ocasión del día europeo contra esa práctica.
“En caso de cualquier fallo de la Justicia, a lo que ningún sistema está inmune, (la pena de muerte) representa la pérdida terrible e irreversible de una vida humana”, señaló en un comunicado la jefa de la diplomacia europea, Catherine Ashton.
La Alta Representante argumentó que la pena capital es “una acción cruel, inhumana e irreversible que viola el derecho humano básico a la vida y la dignidad”, a la vez que es “incapaz de revertir el crimen que trata de mitigar la pérdida sufrida por una víctima”.
Por eso, la UE se opone a su aplicación “en todos los casos y circunstancias” y aboga por que se torne “una reliquia del pasado”.
“Su abolición universal es uno de los objetivos centrales de la política de la UE en materia de derechos humanos”, afirmó Ashton.
La diplomática deploró que 20 de los 58 países que mantienen en vigor la pena capital siguen realizando ejecuciones “en una tasa alarmante” y les urgió a “restringir progresivamente” su aplicación.
También animó a todos los países a “acceder al segundo protocolo opcional de la Convención Internacional sobre Derechos Civiles y Políticos”, el principal instrumento internacional de las Naciones Unidas (ONU) para erradicar la pena de muerte.
En el marco de su lucha contra la práctica, la UE ha sido el primer organismo regional a prohibir el comercio de materiales utilizados en la aplicación de la pena capital o de la tortura, así como el suministro de asistencia técnica relacionada con tales artículos, recordó Ashton.