Un bebé por el mundo
Las vacaciones son un momento muy esperado para cualquier persona y el primer viaje de tu bebé no tiene por qué ser un martirio. No es tarea fácil, pero tampoco imposible, así que prepárate física y psicológicamente y ¡a disfrutar!
¡No te lleves todo el clóset!
Las mujeres por lo general nos queremos llevar el clóset completo para un viaje, aunque solamente sea por un par de días. Cuando se tiene un bebé es lo mismo, pero debes tener en cuenta una pregunta ¿de verdad necesitas tantas cosas? Piensa en los aeropuertos y hoteles y la cantidad de bolsas que tendrías que cargar, además de tu bebé. Lo principal es que el pequeñín se encuentre lo más cómodo, limpio, bien alimentado, contento y protegido que se pueda. Eso sí, ten a la mano un cambio de ropa tanto tuyo como del bebé, por aquello de que se ensucie… o te ensucie.
Checa el clima del lugar a donde se dirigen para elegir la ropa que van a llevar. Si es una playa, olvídate de las chamarras grandes y abrigos ni aunque lo hagas “por si las dudas”, opta por una chamarra pequeña o rompevientos por si llueve. Lleva sólo la ropa adecuada para el lugar, el clima y los días que irán.
Prepara tu KISH (kit de supervivencia higiénica)
Para los niños se requieren cosas esenciales donde definitivamente no se te puede olvidar nada. Prepara una lista con lo necesario para el bebé, en la cual no deben faltar los siguientes puntos:
Utensilios: Lo principal, por supuesto, pañales. Si su destino es un lugar donde puedan comprar pañales, lleven sólo los que necesiten para el camino, para no tener que cargar con la bolsa enorme. Tampoco olviden las toallas húmedas, pomada para rozaduras, baberos, chupones, champú, jabón, biberones, fórmula (si se la das), peine o cepillo, y sus juguetes y cuentos favoritos, de preferencia los que ocupen menos espacio.
Para cualquier emergencia no olvides tener a la mano el teléfono del pediatra y si van fuera del país también es recomendable cargar con un seguro médico.
Botiquín: Así como para un adulto, para un bebé es importantísimo el botiquín de primeros auxilios. Este debe llevar algodón, curitas, termómetro, agua oxigenada, analgésicos, pomada para las picaduras y protector solar.
¡Mamá tengo hambre!
Si tu bebé aún toma leche materna, no tendrás de qué preocuparte, solamente no olvides algo para cubrirte en caso de que tengas que alimentarlo en público o si es muy incómodo para ti, puedes preparar la leche materna antes del viaje ya en los biberones y en alguna hielerita fría para que no se eche a perder. De otra manera, lleva agua a la mano, leche en fórmula, jugos y bocadillos como fruta picada o galletas y si es un viaje más largo, un sándwich o alguna merienda sería ideal. Si viajas en avión, lleva preparada alguna comida y puedes pedirle a la azafata que caliente la comida.
No te olvides de ti, si estás amamantando a tu bebé lleva abundante agua para mantenerte hidratada.
Sentado, no cargado
Si el viaje es en carro, jamás lleve al bebé en brazos, por muy necio que el pequeño esté. La silla del bebé debe de ser del tamaño adecuado dependiendo de su altura y peso y estar colocada en el asiento de atrás del auto, acomodada de lado contrario al que se dirige el carro. Puede ser que el niño proteste de estar atado todo el tiempo, pero no ceda a sacarlo y traerlo en brazos, manténgalo en su asiento aunque reniegue e intenten hacer una parada cada 2 horas para sacarlo a que estire sus piernitas, comer, cambiarlo o incluso jugar un momento con él pero jamás lo deje solo, ni dentro ni fuera del auto. Si está muy necio, ten preparados algunos de sus juguetes, cuentos o incluso un audio libro o música infantil que puedas poner en tu auto serían de gran ayuda.
En caso de viajar en avión, mantén a tu bebé en tus brazos y lleva preparada su silla por si el vuelo no va lleno y te dan la oportunidad de colocarla en algún asiento vacío.
La primera vez que viajas con tu bebé es normal sentir un poco de nervios y miedo, pero intenta controlarte, ya que los niños sienten a su mamá y podrán alterarse también. Así que, relájate, agarra a tu bebé y tus maletas y ¡Bon voyage!
FUENTES:
www.todobebe.com
www.serpadres.es