Aun cuando fue el América el equipo más goleado en el Apertura 2011, recibiendo la cabaña de Armando Navarrete 31 pepinos, Santos Laguna mostró a lo largo del torneo también tener una defensa de agua, pues los goles entraron por racimos hasta sumar 25.
Y también resulta interesante resaltar que a lo largo del certamen el equipo de la Comarca mostró tener la mejor ofensiva, apuntalada por el lagunero Oribe Peralta, quien anotó casi la tercera parte de la cuota santista con 10 de los 31 conseguidos.
Reconociendo sus grandes fallas a la defensiva, en los pocos días que ha tenido el cuadro lagunero se ha trabajado especialmente con la zaga, pero empezando desde la media cancha, por los cambios hechos ahí.
En el partido contra Gallos Blancos del pasado jueves, Benjamín Galindo estuvo constantemente señalándole a Cándido Ramírez cómo moverse para ayudar a Iván Estrada, quien antes tenía todo el problema solito, al dejar la puerta abierta desde antes.
Así que de última hora Cándido podría quedar en los planes importantes para la próxima campaña, uniéndose a Carlos Alberto Ibáñez, el jovencito proveniente del Atlas, que tan buen desempeño tuvo, algo que antes le ha servido para estar en selecciones juveniles.
Así que ahora en la banca lagunera ya no estará gente desconocida sino un grupo de jóvenes, unos surgidos de la cantera, como Cándido Ramírez, y otros de diferentes equipos, como Alberto Ibáñez, que procedente del Atlas llegó para ser titular muy joven.
Mruelas@elsiglodetorreon.com.mx
