Lo más sobresaliente del empate a dos goles que sacó Puebla ante Santos fue la forma tan clara con que los delanteros santistas Hérculez Gómez y Darwin Quintero desaprovecharon oportunidades de ampliar el marcador cuando llevaban dos goles a favor, anotados por Quintero y Gómez.
Ambos pensaban que el partido estaba ganado y se dedicaron a jugar a medio gas al igual que sus compañeros, lo que aprovechó de maravilla el equipo poblano para empatar en la segunda parte por conducto de Matías Alusitza, y así Santos hizo el ridículo ante su público.
No es posible que el equipo campeón tenga este tipo de actuaciones. Su media cancha fue un desastre y la marcación de sus defensas, especialmente de Galindo, fue pésima. Menospreciaron al rival, seguramente pensando en ganarle al Real Madrid mañana.
Siguen para el equipo de la Comarca dos compromisos difíciles, ante el León en el Nou Camp el viernes 10 a las 21.30 horas y el sábado siguiente en el Corona ante Pumas, que de la mano de Joaquín del Olmo aspira a recuperar el mucho terreno perdido.
Y hoy por la mañana volveremos a cruzar los dedos esperando una victoria de la Selección Mexicana, ahora contra la de Senegal, que es muy superior a la de Gabón, pues tiene jugadores con mayor experiencia y muy fuertes defendiendo y atacando.
Oribe Peralta, que vive gran momento, debe continuar con esa entrega que le ha dado tantas glorias, ayudando en el ataque y la defensa, lo que ya ha llamado la atención en tierras europeas.
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