Una mochila de ¡10!
Para un niño es muy sencillo escoger una mochila para este regreso a clases, solamente se dejan llevar por el diseño o el personaje y ¡listo! Sin embargo, esta no es la mejor manera de elegir. Siguiendo estos sencillos pasos lograrás encontrar la mochila perfecta para cuidar la espalda de tu hijo y que además él este contento.
¿Con o sin rueditas?
Las mochilas con ruedas son recomendables para niños pequeños, aquellos que están en el jardín de niños, o bien, apenas ingresando a primaria. A esa edad, la columna vertebral al igual que el resto de su cuerpo aún es un poco débil, por lo que se debe evitar que carguen mucho peso en sus espaldas para prevenir dolores y deformaciones en un futuro. La manilla debe ser extensible para ajustarla a la altura del brazo y lo ideal es que el niño vaya cambiando de mano constantemente para evitar lesiones en la muñeca.
No más de 10%
El peso de la mochila no debe de exceder del 10% del peso actual del niño, por lo que también toma en cuenta la cantidad de material con el que cargarán. Es por esto que se deben repartir útiles y libros tanto en la escuela como en el hogar y de esta manera cargar solamente con lo necesario.
El tamaño ideal
Se debe tomar en cuenta la cantidad de material que cargará el niño, ya que de nada sirve comprar una mochila pequeña si va a tener que llevar libros en la mano, o bien una grande si sólo lleva un libro y un cuaderno. Si optas por una de mayor tamaño porque así lo requiere, asegúrate que contenga la cantidad de compartimentos necesarios para lograr distribuir de mejor manera el peso.
No más grande que yo
La mochila no debe ser más larga desde la base del cuello y hasta 5 centímetros sobre la cintura del niño, ya que de lo contrario será más incomodo llevarla. Si la mochila es más grande, incluso el niño tendrá la oportunidad de meter más cosas en ella, por consiguiente, cargará más peso que puede lastimar su espalda. Si es más pequeña, será muy incomodo lidiar diariamente con los pequeños tirantes.
Tirantes acolchonados
Es muy importante que los tirantes sean anchos, acolchonados y ajustables para que soporten el peso y no dejen marcas ni lastimen los hombros. Quien carga la mochila debe aprender a utilizar ambos tirantes, ya que muchos utilizan sólo uno y esto podría causar dolores de espalda.
Todo en su lugar
Al momento de acomodar las cosas en la mochila, los objetos más pesados deben ir pegados a la espalda, y ubicar los libros y materiales de manera que no se resbalen con el movimiento. El respaldo de la mochila también debe ser acolchonado y permitir la transpiración, ya que de lo contrario puede provocar que la espalda sude y el niño esté muy incómodo.
FUENTES:
http://nectarbienestarysalud.es
http://hacerfamilia.cl