El esmaltado permanente permite unas manos hermosas por más tiempo.
Ir a la playa, la piscina o la montaña, marcharse al extranjero a cumplir compromisos laborales, a hacer turismo o de luna de miel, asistir a variados actos sociales, requiere siempre una belleza a prueba de todo, para la que no siempre se dispone de tiempo.
La buena noticia es que en el caso de las uñas de manos y pies, ahora se cuenta con la técnica del esmaltado permanente, mediante la cual, gracias a productos de gran calidad y procedimientos especializados, se puede mantener una estética impecable en estas zonas, sin salpicaduras ni descascarillados, al menos durante dos semanas, aunque según la actividad y ritmo de crecimiento de las mismas, se puede mantener hasta 21 días.
Explica Ivanova Bravo -gerente de una franquicia pionera en Venezuela de este procedimiento que comenzó a aplicarse en el país en abril de 2011- que los esmaltes empleados no se adquieren en tiendas de cosméticos, accesibles al público común. “Nosotros brindamos esta última tecnología en la parte de esmaltes, asociada con los servicios que usualmente ofrecemos. Este es un producto con alta calidad y trayectoria reconocida, de las mejores marcas del mercado”.
A diferencia de las pinturas de uñas convencionales, que duran pocos días en buenas condiciones y que exigen cuidados extras para extender su duración, esta nueva técnica se adapta a situaciones variadas, sin alterarse. “Un target fabuloso es el de las médicos y odontólogas, porque con el uso de los guantes se les dañan y maltratan muchísimo las uñas, lo que no sucede con el esmaltado permanente.
Los productos cuentan con una gran paleta de tonos, “Para la ejecutiva tenemos el color suave, algo no tan llamativo, para acudir a una reunión de negocios; para la playa contamos con los eléctricos, unos fucsias espectaculares. Para una fiesta, los marrones, nacarados y con escarcha, que pueden combinarse”.
Es un producto tan versátil que se puede crear, según el color del vestido y necesidad de la persona, un tono específico, luego, sobre el tono escogido, se le coloca un brillo, escarcha, si se va para una fiesta. Hay muchas posibilidades.
Por otra parte, al disminuir el uso de solventes y aplicación de productos por la extensión de los lapsos de duración del esmaltado, indica, la uñas ganan fortaleza, lo que también tiene su origen por el empleo de productos de alta calidad, así como por la aplicación de una manicure profesional.
¿En qué consiste?
En solo 60 minutos como máximo, las personas pueden obtener los beneficios del esmaltado permanente. En primer lugar las personas deben ser sometidas a una manicure de excelente calidad, porque como va a tener un tiempo prolongado sin realizarse un mantenimiento de sus uñas, tiene que tener como base un buen procedimiento, para que el producto perdure y se obtengan los resultados esperados. Esto implica la remoción correcta de las cutículas, el limado, la exfoliación para eliminar células muertas, la hidratación, entre otros aspectos. Y el cuidado posterior de las manos hidratándolas al menos dos veces al día. Luego de realizar la manicure tradicional, se puede realizar otro servicio; por ejemplo la orgánica, donde se utilizan diferentes productos para hidratar y exfoliar.
Este procedimiento implica aplicar un desengrasante, una base, para evitar que el tono del esmalte altere el color natural de las uñas y eliminar imperfecciones si las hubiese en la superficie de las uñas, el esmalte permanente, un sellador y un secado con lámparas UV, que permite puedan hacer uso de sus manos y pies, sin esperar ningún tiempo adicional y sin correr el peligro de que se dañe el trabajo realizado. El retiro del producto se debe realizar en el mismo lugar donde se aplicó.
Paleta de colores
Este año han entrado como novedad tonos pasteles iridiscentes, full tono, con un énfasis en verdes y azules. Se emplean desde los eléctricos en las más jóvenes, que les encantan para la playa, anaranjados, fucsias. En vacaciones se imponen los anaranjados, amarillos, neones, eléctricos; cuando comienza la temporada escolar, empiezan las ‘francesitas’, colores más del día a día. En invierno los tonos escarchados, brillantes. Se mantienen los rojos, vino tinto y marrones.