Foto: NORMA IBARRA
El panteón municipal de Gómez Palacio data del año 1900 y en él se encuentran sepultados los restos de 15 revolucionarios, sin embrago, los vándalos en busca de joyas y armas, se han dedicado a la destrucción de las tumbas de estos ilustres.
El panteón
El cementerio está dividido en tres secciones, la primera denominada Guadalupe I, donde fueron sepultados los gomezpalatinos desde 1901 hasta 1925 y donde se encuentran 60 tumbas labradas en cantera de 1910 hasta 1914 y ya después los sobrevivientes de la lucha armada que terminó en el norte el 31 de agosto 1920.
El cronista gomezpalatino, Pablo Amaya, detalla que dentro de las 30 tumbas históricas se encuentran los restos de 15 revolucionarios, entre ellos, José y Cosme Villa, participantes de aquel domingo 20 de noviembre de 1910, fecha en que estalló la Revolución en Gómez Palacio, de ahí el nombre otorgado al municipio como Cuna de la Revolución Mexicana.
En la segunda sección del panteón denominada Guadalupe II, se pueden observar alrededor de 20 mausoleos de particular tamaño y precio, pertenecientes a familias libanesas, árabes, judías y españolas, quienes trajeron el desarrollo a la región al finalizar la Revolución.
Una muestra de estas tumbas es la de la familia Cano, que cuenta con una escultura con un valor aproximado de 25 mil pesos, además de las grabaciones en las lápidas hechas con letras de bronce.
La tercera sección se conoce como Las Rosas, donde están sepultados 8 mil cuerpos que ocupan el 40% de su capacidad y que hasta la fecha continúa operando.
Daños
El cronista asegura que en los últimos años las tumbas de los revolucionarios se han visto afectadas por los vándalos, ya que tienen la creencia de que en éstas se encuentran joyas y armas que datan de aquellas épocas. Con la finalidad de preservar la historia y evitar más daños, el próximo 2 de noviembre se inaugurará la primera parte de un panteón-museo en el que se colocarán las tumbas más antiguas.
Construcción
Este camposanto se encuentra en una superficie de 60 hectáreas y fue constituido el 15 de septiembre de 1900 por el primer jefe político de Gómez Palacio, Jesús Vargas.