Los redactores en las oficinas del gober Rubén Moreira y del alcalde Eduardo Olmos trabajan en sendas cartas a directivos de una empresa japonesa, para hacer control de daños en el homicidio de cuatro trabajadores de una planta que la empresa en cuestión, del ramo automotriz, tiene en La Laguna. Según nuestros subagentes, los empleados fueron víctimas del ataque de un grupo criminal y la noticia voló hasta Tokio, a oídos del director general de la empresa que, por cierto, había sido cortejada por don Rubén y don Lalo en su viaje a Japón. La noticia, huelga decirlo, es un duro golpe a los prospectos de inversión en La Laguna que pudieran estar considerando los japoneses.
El problema es que durante la visita del gober y el alcalde en noviembre pasado, el tema de seguridad no fue uno de los principales asuntos que se comentaron a la hora de tratar posibles inversiones en la Comarca, pero ahora con estos homicidios el golpe les llegó directo a los japoneses, quienes ya preguntan qué está pasando por estos lares. Además, como entre los ejecutivos de allá se platican todo, es probable que directivos de otras firmas ya estén enterados. Dicen los subagentes que el gober y el alcalde buscarán explicar el lamentable hecho y dar todas las seguridades de que el problema de la delincuencia no debe frenar la inversión. Ora sí que, como pide don Rubén, van a tener que hacer piruetas verbales para hablar bien de Coahuila.
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En la Presidencia Municipal se cocina un cambio en el equipo del alcalde Eduardo Olmos, que obedecería a las necesidades políticas del gobierno estatal. Según nuestros subagentes, el director de Desarrollo Social, Fernando López, pasará a las filas del secretario de Gobierno Miguel Ángel Riquelme par ayudarle en la operación electoral, particularmente en el vínculo entre el PRI y los programas sociales que serían reactivados en los próximos meses para apaciguar a las bases enfurecidas por la cancelación de los apoyos clientelares. Al relevo de don Fernando entraría Shamir Fernández, que anda muy angustiado porque ya dejó el hueso de diputado local. Con este movimiento, don Shamir parece fuera de la contienda por una diputación federal. Sin embargo, el excuruleco es muy dado a sembrar para su parcela por lo que no se descarta que busque el trampolín para brincar a otro cargo, a menos que el gober Rubén Moreira decida aplicar a los encargados de desarrollo social de los municipios la regla que ya le impuso al titular de la secretaría estatal, de separarse del cargo dos años antes de la elección si le quiere tirar a una candidatura.
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Por cierto, con esto de los cambios en el Municipio, llama la atención que el alcalde Eduardo Olmos no hace movimientos para castigar malos desempeños, pues de cualquier manera salva a esos funcionarios dentro de la nómina. Nuestros subagentes reportan el caso de César Salas, quien fue cesado como director de Parquímetros luego de que sus inspectores fueran sorprendidos ordeñando las máquinas y la Tesorería y la Contraloría le abrieron investigaciones por faltantes en el ingreso de dinero. Don César fue removido pero negó responsabilidad, lo cual no se lo creyó nadie sobre todo porque su sucesora en el cargo, Amira Darwich, elevó la recaudación a niveles récord. Esa fue la confirmación de que, efectivamente, se estaban haciendo travesuras con los parquímetros, pero nadie consideró necesario castigar al funcionario. Al contrario, ahora aparece firmando como jefe de inspectores de Espectáculos, encargado de supervisar permisos para eventos. Huelga decir que esta chamba también es una magnífica oportunidad para la “ordeña” pero nadie se ha fijado en eso.
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La pasada elección de aspirinos del PAN a diputados plurinominales permitió medir el músculo de los grupos de poder del partido rumbo a la definición de candidaturas, pero todo indica que salieron “tablas”. El senador y primer compadre, Guillermo Anaya, logró enviar al regidor con licencia Marcelo Torres y el exdiputado local Rodrigo Rivas como candidatos a integrar la lista de Coahuila para las “pluris”. Para don Memo el triunfo de don Marcelo fue clave pues anticipa que el regidor también va encaminado a hacerse de la candidatura del distrito 6 por el principio de mayoría, desactivando las aspiraciones de Rodolfo Walss. Sin embargo, el primer compadre no pudo frenar el avance del excandidato a la alcaldía, Javier López Macías, que prácticamente amarró el distrito 5. Todavía está por verse quién operó la “rasurada” del padrón que impidió a decenas de militantes votar en Torreón, pero nuestros subagentes dicen que las sospechas apuntan al grupo de don Memo, que no quieren perder el control del proceso. ¿Será?
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Nuestros subagentes infiltrados en la toma de posesión del nuevo comandante de la XI Región Militar notaron algunas fallas de protocolo que tendrían lecturas interesantes. Quizá la más grave fue que el gober Rubén Moreira no se presentó en la ceremonia en la que el General Roberto de la Vega asumió el mando militar de Coahuila y Chihuahua, y la ausencia fue más notoria porque el otro gober involucrado, César Duarte, estaba en primerísima fila. Obviamente empezaron los comentarios negativos entre los presentes, porque aparte el desaire fue doble. Dicen los de verde olivo que si ahí hubiera quedado la cosa, no hay bronca, pues don Rubén se disculpó previamente argumentando que debía presidir una reunión de seguridad en Piedras Negras. Pero el detalle es que mandó en su representación a la fiscal de Procesos de la Fiscalía, Griselda Elizalde, que no tiene ni siquiera rango de gabinete pues su nombramiento como procuradora no ha sido ratificado. O sea que también caló que no hubieran mandado a alguien de más nivel. Según los subagentes, don Rubén repondrá la visita con una reunión hoy con el secretario de la Defensa, Guillermo Galván, para que no haya malos entendidos. Pero del lado del Ejército parece que también hubo un desaire pues no se giró invitación a los alcaldes de Gómez Palacio, Rocío Rebollo, y Lerdo, Roberto Carmona. Quizá la razón fue que La Laguna de Durango pertenece a otra región militar, pero ahí está el meollo del asunto, pues mientras el Ejército trae un operativo contra el crimen en la Comarca, a alguien se le olvidó que éste se desarrolla en una zona metropolitana que también abarca el otro lado del Nazas. Ojalá todo quede en las formas y esto no sea un reflejo de cómo se aborda de fondo el problema de la inseguridad.
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Si alguien se topa al gober de Durango, Jorge Herrera Caldera, habría que pedirle que se regrese a vivir al planeta Tierra. Esto a cuento de unas declaraciones de don Jorge en las que calificó de “desproporcionada” la colocación de la ciudad de Durango entre las diez ciudades más violentas del país (y del mundo). Según el gober, tal calificativo está fuera de la realidad, aunque con más de 400 homicidios el año pasado y la aparición de casi 300 cadáveres en varias fosas clandestinas en distintos puntos de la ciudad, el que parece fuera de la realidad es el gober. Porque además don Jorge debe recordar que Gómez Palacio y Lerdo van incluidas en el conteo de homicidios de Torreón, también calificada como una de las ciudades más violentas del país. Pero como es costumbre en Durango, nomás se preocupan por la capital. Al menos en Coahuila su colega Rubén Moreira no negó que la seguridad es un problema gravísimo antes de pedir que se hable bien del Estado. En Durango parece que la mejor estrategia es hacer como que no hay bronca.
