El lanzamiento espectacular de la Policía Metropolitana de La Laguna, con agentes uniformados y armados, con sus patrullas y toda la cosa, nomás se quedó para la foto, pues la ceremonia de hace dos semanas no tuvo seguimiento para que la nueva corporación se pusiera a trabajar. Tal parece que el gober de Coahuila, Rubén Moreira, nomás vino a dar el banderazo y luego se desentendió del asunto, mientras que el de Durango, Jorge Herrera Caldera, ni siquiera vino, por lo que no se puede decir que estaba muy involucrado. Pero el caso es que sus subordinados en las fiscalías no agarraron la encomienda con la urgencia debida y es claro que los malandros ya empezaron a meter goles.
En los últimos días se han desatado hechos violentos de grupos que se mueven a ambos lados del Río Nazas y los 150 agentes metropolitanos parece que siguen acuartelados. Llama la atención, por ejemplo, que uno de esos casos haya involucrado una persecución por el Periférico que culminó en el ataque a un agente de la Fiscalía de Durango. También se ha notado un aumento de agresiones a policías en la zona conurbada que han sido respondidos sólo por corporaciones locales. Nuestros subagentes comentan que este es el tipo de casos que, según esto, serían los adecuados para que la Policía Metropolitana entrara en acción. Pero también se dice que el grupo fue integrado con prisas, para darle trámite a la ceremonia, pero sin la capacitación para labores operativas que requieren. Hasta ahora no se sabe dónde están o qué hacen los agentes y son las policías municipales las que están en la posición más vulnerable sin el apoyo que supuestamente tendrían de los “metropolitanos”. Pero como suele suceder en el gobierno, la inauguración es lo que cuenta, aunque la obra esté detenida.
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Por fin salió el humo blanco en el PRI para el registro de los “candidatos de unidad” para las diputaciones federales, pero nuestros subagentes comentan que las negociaciones se fueron hasta la recta final. En Torreón, la candidatura de Verónica Martínez en el distrito 5 se cayó para darle espacio al exalcalde Salomón Juan Marcos, que se había quedado sin la senaduría. Llama la atención que el gober Rubén Moreira haya bajado a doña Verónica cuando en el Palacio Rosa se comentaba que no se le había dado el cargo de directora del Instituto de las Mujeres precisamente para postularla. La que sí tenía cargo formal y se convirtió en el primer chapulín del actual gobierno fue la secretaria de Turismo, Norma González. En Gómez Palacio, nuestros subagentes cuentan que la decisión se tomó hasta el lunes, en la víspera del registro, y el gober Jorge Herrera se inclinó por la primera regidora Alma Marina Vitela, echando por tierra la intención del curuleco Ricardo Rebollo por dejar ese distrito en manos de su grupo, con el director del Sideapa, José Miguel Campillo. Se dice que al gober no le cayó bien que la alcaldes Rocío Rebollo declinara la candidatura, por lo que no estaba dispuesto a dejarle la posición. Sin embargo, tampoco optó por favorecer al grupo de Leticia Herrera, pues ya con la senaduría hubo bastante generosidad.
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La candidatura presidencial de Josefina Vázquez Mota provocará un realineamiento de fuerzas del PAN_en La Laguna. Dicen nuestros subagentes que en Los Pinos tendrían que hacerle un ajuste de cuentas al senador y primer compadre Guillermo Anaya, pues doña Josefina arrasó en Coahuila con una ventaja de cuatro a uno sobre el “delfín” Ernesto Cordero, con lo cual se confirma la sospecha de que el grupo de don Memo anduvo operando contra su compadre. También se comenta que el exembajador y suspirante al Senado, Jorge Zermeño, sale fortalecido, aunque su rival Luis Fernando Salazar también, pues logró pasarse a tiempo al bando “chepinista”. Sin embargo, éste va enfrentar un “coletazo” de los corderistas, pues los subagentes reportan que el otro suspirante a la candidatura al Senado, Jesús Ramírez (que estaba con el exsecretario de Hacienda) lo va a demandar en la fiscalía electoral por supuestos apoyos que recibiría de la delegación de Desarrollo Social. El aspirino a diputado, Rodolfo Walss, también recibió una carga de oxígeno por operar en el bando de la ahora candidata, aunque no se sabe si eso le alcanzará para imponerse al grupo de don Memo, que impulsa a Marcelo Torres. Al menos esto garantiza que la recta final del proceso interno para elegir candidatos al Congreso se va a poner buena. Y del lado de Durango, la que quedó mejor parada fue la exdiputada Salomé Elyd de Katsicas, que operó la campaña de doña Josefina y es cercana a la candidata, por lo que prácticamente tiene garantizado el espacio en la fórmula para el Senado. En el reacomodo, los perdedores son el exsubprocurador Juan de Dios Castro y la exalcaldesa de Lerdo, Rosario Castro, pues ellos andaban en el bando de Ernesto Cordero y ahora van a tener que arrimarse a otro árbol.
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Dicen nuestros subagentes infiltrados en la Secretaría de Finanzas de Coahuila que, poco a poco, empezaron a salir los pagos a proveedores y contratistas a los que el “Gobierno de la Gente” les quedó a deber un dineral. A tono con el lema de la nueva administración, se ha visto a algunos empresarios salir muy sonrientes con sus anhelados cheques. El problema, anotan los subagentes, es que hasta ahora los beneficiados son solamente de la peronera capital mientras que los del resto del Estado todavía tienen que hacer fila y no ven para cuándo. Al menos los de Torreón no han recibido nada más que el atole con el dedo que les dio la semana pasada el secretario de Finanzas, Jesús Ochoa. Lo preocupante, se dice por ahí, es que algunas empresas laguneras están a punto de tronar por la falta de dinero, pues la chamba se secó y no tienen el dinero del Estado para salir de aprietos. Esta situación no es sólo en las empresas que hicieron obras o prestaron servicios al anterior gobierno, sino también en las que entraron al programa de apoyo para modernización, en el que el Estado pagaría los intereses de créditos bancarios. Pero como en el nuevo gobierno la prioridad también parece ser consentir a los de Saltillo, pues todos los demás deben permanecer formados.
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Como si los miembros de organizaciones civiles que ayudan a población vulnerable no tuvieran ya desaires suficientes de parte de la Tesorería municipal que les cortó el apoyo financiero, el secretario del Ayuntamiento, Miguel Mery, todavía consideró que les hacía falta una descortesía más. Dicen nuestros subagentes que los representantes de asociaciones que manejan casas de atención a niños, ancianos y personas con discapacidad se agenciaron una cita con don Miguel para que les explicara la suspensión de los apoyos mensuales. Pero resulta que el funcionario los dejó colgados una hora afuera de su oficina, hasta que su secretaria les informó que estaba ocupado con el alcalde Eduardo Olmos y que no tenía para cuándo salir. De modo que los afectados se fueron de nuevo con las manos vacías, como se han ido cada vez que logran hablar con el tesorero Pablo Chávez Rossique o la directora del DIF, Dulce Pereda, porque dicen que nadie les resuelve. Y el problema no sólo es que se suspendieron los apoyos mensuales que ayudan a la operación de los centros, sino que tampoco se ha pagado la totalidad del dinero de otro fondo para infraestructura y equipamiento que está pendiente desde mediados del año pasado. Lo que las huestes de don Lalo no han logrado entender es que estas asociaciones alivian al Municipio de una pesada carga de atención a grupos vulnerables y lo menos que deberían hacer es echarles una mano. A menos, claro, que la administración se quiera encargar de ellos con la excelente eficiencia con que hacen todo lo demás.
