Mientras se pasea entre los rascacielos de Tokio y Taipei, el gober Rubén Moreira seguramente debe gozar de un respiro de todas las broncas que dejó en el terruño. El que debe estar padeciendo ese viaje es el secretario de Gobierno, Miguel Ángel Riquelme, y no sólo porque no lo llevaron, sino porque lo dejaron encargado del changarro y ahora debe salir a hacer frente a todo tipo de asuntos, aunque no sean de su incumbencia. Por eso lo mismo opina de la deuda que de la situación en los penales. Lo curioso, dicen nuestros subagentes, es que los titulares de las dependencias que lidian con los problemas más grandes y urgentes del Estado (finanzas y seguridad) están prácticamente desaparecidos.
Por un lado, en la peronera capital dicen que el secretario de Finanzas, Jesús Ochoa, de plano no sale de su oficina y para tratar en público cualquier tema financiero manda por delante al jefazo de la Administración Fiscal, Ismael Ramos, o al propio secretario de Gobierno. Unos dicen que don Chuy no quiere toparse con los contratistas y proveedores a los que el Estado debe dinero, pero otros comentan que el funcionario está en la mira de la Procuraduría General de la República y aunque hasta ahora se ha salvado de ser acusado formalmente de la contratación irregular de créditos, todavía existe la posibilidad de alguna acción legal en su contra. Por otra parte, el fiscal Domingo González Favela no ha aparecido desde que la misma PGR destapó la cloaca de protección criminal en la Fiscalía del Estado y se comenta que anda inquieto ante las acusaciones contra agentes de la Fiscalía y las sospechas en torno a su exjefe y promotor, Jesús Torres Charles. Solamente el paro de guardias y trabajadores del Cereso de Torreón, que exigían una mejora de sus condiciones laborales, fue capaz de sacarlo de su oficina. Pero lo que más alcanzó a prometer don Domingo fue arreglarles una cita con (¿quién creen?) el secretario de Gobierno, Miguel Riquelme, que ahora tiene otra papa caliente en su escritorio. Mientras tanto, el gober viaja por el Lejano Oriente promoviendo inversiones para La Laguna (según sus propias palabras), para lo cual anda presentando entre empresarios asiáticos al alcalde de ¡Saltillo!, Jerico Abramo, que está feliz de la vida.
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El exalcalde Jorge Zermeño continúa en su intento para bajar a Luis Fernando Salazar de la candidatura al Senado. Su último disparo fue un recurso de impugnación ante el Comité estatal del PAN, argumentando compra de votos, uso de programas públicos y hasta “infiltración” de sus simpatizantes para “voltearlos” a otros candidatos. Pero nuestros subagentes dicen que no le fue bien, porque de entrada la comisión de elecciones “bateó” la queja por considerarla fuera de tiempo, aunque lo invitó de la manera más amable, a continuar su impugnación ante el Tribunal Electoral, a ver cómo le va con los magistrados. Se comenta que a don Jorge se le acaba el tiempo para tumbar a don Luis de la candidatura, que debe estar formalizada en marzo. Los subagentes dicen que el lagunero no tiene muchas alternativas y que ya estaría buscando dónde acomodarse. Algunos llegan a comentar que don Jorge buscaría ser reincorporado a la Embajada en España para, al menos, pasar el resto del sexenio alejado de la grilla. El problema es que no está claro si su separación de ese puesto diplomático fue mediante licencia, que le permitiría regresar, o con renuncia definitiva. Ese es el primer dilema a resolver para que don Jorge pueda evitarse la pena de vivir en el error.
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Ante los desplegados exigiendo su renuncia, el alcalde Eduardo Olmos salió con la consabida reacción de que se trataba de una embestida electorera y obviamente rechazó cualquier intención de abandonar la sagrada nómina. Sin embargo, nuestros subagentes comentan que don Lalo intentaría aplacar estos movimientos con algunas medidas. Vista la letanía de problemas en la ciudad que podrían empezar a resolverse con algunos ajustes en las dependencias municipales, es posible que el alcalde maquine una ronda de cambios. Y es que varios de los puntos tocados por los “abajofirmantes”, como los parques y jardines, el servicio de limpieza, los semáforos o los problemas de abasto de agua, pueden ser atacados inmediatamente con sólo poner a personas capacitadas al frente de las dependencias. Hasta ahora no ha sido la tónica del alcalde, a quien le dio por poner a cuates “milusos” en algunas oficinas clave para el buen funcionamiento de la ciudad. Habrá que ver si ahora don Lalo sacrificará a algunos de sus consentidos para apaciguar la embestida de demandas para que renuncie. Los subagentes también dicen que al interior de la Presidencia Municipal han empezado a distinguir entre los grupos que la traen con el alcalde y se comenta que el llamado “Participación Ciudadana” podría ser atendido de manera más expedita debido a que se trata de los activistas que antes integraban el Instituto de Buen Gobierno, mientras que el grupo “Claridad y Participación Ciudadana”, apadrinado por la Coparmex, todavía levanta ámpula en la Presidencia, donde los ven como muy intransigentes y más ahora que “calentaron” a los camaradas de Saltillo, quienes ya piden la renuncia del gober Rubén Moreira. A ver si se las da.
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El que ya de plano anda desatado y por la libre es el director de la Comisión de Aguas de Durango, Miguel Calderón. A pesar de que la terca realidad lo desmiente, don Miguel pregona que ya están instalados los primeros filtros domiciliarios contra arsénico en cuatro municipios laguneros. Por supuesto que esas declaraciones se las avienta en Durango, donde no saben que eso no es cierto, pues hasta ahora no hay ninguno. De hecho, también lo sabe el gober Jorge Herrera Caldera, que tuvo que reconocer que la instalación prometida desde hace dos meses arrancará hasta marzo. Nuestros subagentes no se explican tal contradicción entre el gober y su subordinado, a no ser que éste tenga una agenda propia. Porque además don Miguel sigue machacando el tema de la planta potabilizadora para llevar agua de las presas a la Comarca Lagunera y ya la da por un hecho. Presume que el proyecto ya está consensuado, lo cual es otra mentira pues todavía hay oposición en el gremio de productores que no ven en la potabilizadora una solución de fondo al problema del acuífero. Pero el jefazo de la CAED está tan emocionado que ya hasta dijo que el agua de las presas sería potabilizada no nada más para La Laguna, sino también ¡para Durango! Obviamente ignora que le será prácticamente imposible lograr consenso para ese despropósito, pero es curioso que la Comisión Nacional del Agua no le ha parado las cabras a la incontinencia declarativa de don Miguel. Los subagentes comentan que tal silencio quizá se debe al precio que trae todo el proyecto, unos 6 mil millones de pesillos. O sea, un negocio muy jugoso.
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Tremendo “oso” hicieron los policías municipales de Torreón al izar al revés la bandera monumental en la celebración del Día de la Ídem. Iban muy solemnes los agentes elevando el lábaro patrio hasta que un soldado advirtió que el águila estaba de cabeza, lo cual resultó en la embarazosa situación de tener que bajar la bandera y reacomodarla, para enojo de los militares y murmuraciones de los asistentes, cargadas de no poca mala leche. Pero nuestros subagentes comentan que los muchachos del teniente Adelaido Flores en realidad querían mandar un mensaje. Estos subagentes son marineros de profesión y explican que en la tradición naval, izar una bandera al revés en un barco es para indicar señal de peligro y solicitar ayuda. A lo mejor por la terrible situación de inseguridad que vive La Laguna, los policías no andaban tan errados.
