Todavía falta un año para que se definan las candidaturas a la alcaldía de Torreón, pero en el PAN ya se alinean los tiradores. Nuestros subagentes reportan que dos próceres que ya cobraron en el antiguo edificio de la avenida Matamoros quieren hacerlo otra vez, ahora en el flamante edificio de la Gran Plaza (si es que algún día lo acaban). Se trata de los exalcaldes Jorge Zermeño y Guillermo Anaya. Según los subagentes, en el PAN calculan que sus probabilidades de recuperar la presidencia municipal son altas debido a los escándalos que rodean al gobierno de Coahuila, por lo que el hueso se volvió codiciado otra vez. Don Jorge, que ha quedado desempleado tras su fallida campaña por el Senado, quedó en buena posición para buscar la candidatura a la alcaldía, pero se comenta que don Memo también le echó el ojo.
El problema para el primer compadre es que su chamba de diputado plurinominal está asegurada y para cuando se defina la candidatura, a principios de 2013 apenas llevaría cuatro meses cobrando en San Lázaro, por lo que quedaría marcado con el fierro de los “chapulines”. Y también habrá un problema para cualquier otro tirador que se quiera enfrentar a estos dos personajes. Por ahí se dice que el delegado de Comunicaciones y Transportes, Jesús de León quiere repetir como candidato a ver si esta vez se le hace, pero que cuando levantó la mano en el PAN se le fueron encima. Obviamente, cualquier panorama en este momento es prematuro pues habrá que esperar el resultado de la elección presidencial y del Congreso, que indicará cómo andan los cálculos electorales. Y si por alguna razón el PAN mantiene la Presidencia, seguramente la búsqueda de un hueso federal provocará cambios en las alineaciones.
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Por cierto, hablando del delegado Chuy de León, a ver si el gober Rubén Moreira no lo empieza a ver con malos ojos tras unas declaraciones que se aventó descalificando las esperanzas que don Rubén tiene en la carretera San Pedro-Cuatrociénegas para detonar la competitividad de La Laguna. Don Chuy comentó que el gober no debería apostarle tanto a esa obra por al menos tres razones. Uno, que todavía le falta mucho para que esté terminada. Dos, que su utilidad como vía alterna a la frontera aún está por verse. Y tres, porque falta mucha chamba que el Estado no ha hecho en la promoción de empleos, construcción de infraestructura y calidad de los servicios. En pocas palabras, que la mentada carretera tan presumida por el gober no es ninguna panacea. Pero nuestros subagentes comentan que el análisis del delegado bien podría ser el ensayo de un discurso de campaña, sin embargo también comentan nuestros subagentes disfrazados de contratistas que bien haría don Chuy en ver el mal estado en que están las carreteras de Coahuila antes de criticar. Como muestra la Torreón-Saltillo la cual como delegado de la SCT no ha podido terminar bien e incluso quedó pendiente un tramo de diez kilómetros.
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Nuestros subagentes nos informan de las nuevas pifias que cometieron algunos de los funcionarios del primer círculo del gobernador de Coahuila, Rubén Moreira, que precisamente por ser “reciclados” de anteriores gobiernos estatales y municipales, de plano no dan pie con bola. Se desconoce a quién se le ocurrió la flamante idea de publicitar el trabajo de “100 Días de Trabajo”, según dice en la publicidad oficial en alusión a los tres primeros meses de don Rubén despachando en el Palacio Rosa. El pequeño detalle es que publicitan y presumen obras no iniciadas ni financiadas en este gobierno como la colocación de los filtros antiarsénico. Si recordamos se trata de siete equipos, cuatro a cargo de Simas y tres del gobierno del Estado pero que fueron financiados con recursos de Apazu y Fondos Metropolitanos, respectivamente, es decir, pura lana federal por 46 millones de pesos, sin aportaciones ni del municipio ni del Estado. Además en la publicidad se mencionan como obras en el rubro de Desarrollo Urbano cuando el tema tiene que ver más con el renglón de la salud pues finalmente es la limpieza del agua potable para consumo humano. Nuestros sub agentes nos explican que a falta de obras, por no tener dinero gracias a la mega deuda, el estado se dedicará a bombardear con este tipo de publicidad para hacer algo de ruido.
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A unos días de que se concreten los enroques en la Tesorería Municipal hacia el Simas y Viceversa, los respectivos “equipos” de Pablo Chávez Rossique y Jesús Campos, se pusieron a temblar porque ven el peligro de salir de la sagrada nómina. En esta situaciones encuentran la directora de Ingresos, Rocío Ríos, el coordinador Javier Riojas y por lo menos otros cinco “asesores externos” del famoso “tesorito” y que son una pesada carga para el erario. En Simas es igual. Por lo pronto ya empezaron a recoger sus libretas y plumas y los cojines de sus cómodas sillas, Bernardo Tapia, José Ángel Meléndez y el gerente técnico, Pantaleón Originales, entre otros. Habrá que esperar los nuevos aires que se esperan en ambas dependencias y desde luego, los encontronazos de pronóstico reservado que se darán.
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Cuentan nuestros subagentes disfrazados de ceniceros que el ex presidente municipal de Matamoros, Raúl Onofre Contreras, ahora busca la dirigencia estatal de la CNC por lo que los campesinos ya se preguntan qué sabe él de las necesidades de la gente del campo, aunque en este país ya ha quedado demostrado que no se necesita ser especialista en la materia para cobrar en la sagrada nómina. Pero la posibilidad de que don Raúl se agarre de esta nueva liana ha generado molestia en el pueblo porque muchos matamorenses no han olvidado que de los 53 millones de pesillos del préstamo que por orden de él autorizó el Cabildo 10 días antes de que terminara su administración (que por cierto dejó tirada para irse en busca de una diputación) el dinero que supuestamente era para obras y acciones de beneficio social, se utilizó en su mayor parte a liquidaciones ilegales de funcionarios de hasta 400 mil pesos por cabeza de su administración y bono de marcha para los regidores, préstamo bancario por el cual la actual administración municipal esta en quiebra al no tener liquidez para hacer ni pequeñas obras y del que jamás se vio reflejado en mejoras reales a la ciudad y mucho menos en el sector rural o en el campo pues en la pasada administración la mayoría de las obras se realizaron con recursos estatales pero eso no es impedimento para que don Raúl busque un nuevo puesto en la grilla de Coahuila.
