Uno de los problemas que padecen las obras públicas de Torreón es la “ensalada” de funcionarios que según esto se encargan de ellas y como tienen nula comunicación no extraña que los proyectos se hagan sin ninguna visión. Por un lado, el jefazo de Obras Públicas del Municipio, Miguel Algara, trae la supervisión de la Gran Plaza y el estacionamiento, pero el edificio de la Presidencia Municipal está a cargo del gobierno estatal, donde la secretaria de Infraestructura, María Esther Monsiváis, tiene peculiar aversión a la ciudad, que solo visita cuando la arrastra el góber Rubén Moreira. Doña Marucha también tiene a su cargo terminar el puente vehicular del TSM, detenido por un simple paso peatonal, y las obras que el Estado tiene tiradas, como el Sistema Vial Alianza, el bulevar Senderos, sin que haya tenido ningún avance en cinco meses de administración. Para completar el plato, otro que mete su cuchara es el director de Urbanismo, Arturo Lozano, a quien le dieron el proyecto del Bosque Urbano para que se entretenga mientras el desarrollo urbano sufre. Además, don Arturo es responsable de otras obras que ya presentan “detallitos”, como la Plaza de Armas, sin que nadie se haga cargo de las fallas. Como cada uno de estos funcionarios jala su propia carreta, resulta muy explicable por qué las obras están como están.
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En rueda de prensa el candidato a la diputación federal por el quinto distrito, Javier López, anunció que el próximo viernes 25 de mayo estará en Torreón la candidata a la Presidencia de la República, Josefina Vázquez Mota, al hacer el anuncio don Javier pudiera mandar el mensaje que es muy cercano a la candidata pero al parece no es así ya que no lo invitan a posar en los nuevos espectaculares de Chepina. Cuentan nuestros subagentes que el evento se va a celebrar en el Coliseo Centenario y ahí seguramente el PAN local va a presumir gran unidad cuando lo cierto es que las diferencias al interior de Acción Nacional continúan. Por un lado está el pleito legal por la candidatura al senado entre Jorge Zermeño y Luis Fernando Salazar. Al ex embajador de España ya se le cuecen las habas por conocer el fallo del Tribunal Federal Electoral, que al parecer será dado a conocer el lunes, tras demandar al joven panista por irregularidades en el proceso interno del albiazul y sueña con así tumbarle la candidatura al senado, sin embargo el joven Salazar no parece muy preocupado ya que luce muy sonriente en varios espectaculares donde le volvieron a hacer el feo a Javier López. Ya habíamos comentado que mientras Marcelo Torres Cofiño y Luis Fernando Salazar comparten casa de campaña en el bulevar Independencia, don Javier tuvo que poner la suya en la Colón. Pues no conformes con eso ahora no lo invitaron a aparecer en los nuevos espectaculares de Josefina, donde la candidata del PAN luce escoltada por Torres Cofiño y Luis Fernando Salazar, quienes aparecen muy sonrientes como si fueran los únicos candidatos. Nuestros subagentes comentan que tal vez le hacen el feo a don Javier porque esté tiene sus bases sociales entre los campesinos, un sector que nunca ha sido muy atractivo para los panistas.
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El regidor de Torreón, José Elías Gánem Guerrero, sigue dando de que hablar y no por su brillante trabajo sino por sus actitudes prepotentes. En la presente administración el joven se ha caracterizado por ser un mal regidor a pesar del apoyo que recibe del alcalde Eduardo Olmos, y es que el edil no ha logrado tener el liderazgo dentro de su bancada en la que de plano nadie le hace caso a pesar de ser de los consentidos del alcalde. Cuentan nuestros subagentes disfrazados de arbotantes que el último hecho bochornoso donde participó el regidor ocurrió el pasado martes en la tarde cuando el papá del edil y proveedor principal del Simas protagonizó feo escándalo cuando le llamó “pen…’’ a un agente de tránsito en cuatrimoto que con singular alegría infraccionaba a un automovilista en el crucero de la avenida Morelos y la Ramón Corona. Al parecer al señor le molestó que el agente realizara su trabajo a media calle y sobre todo que le respondiera a sus agresiones verbales. El problema fue que policías municipales abordo de una patrulla pasaron por el lugar al momento de la discusión y el problema se hizo tan grande que agentes tuvieron que cerrar la calle ante la llegada del edil y su equipo de seguridad (guarros) que se le pusieron a las patadas a policías municipales y estatales que ya se habían concentrado en el lugar y que de inmediato les pusieron el alto con floridos recordatorios maternos para que no se atrevieran a hacerle al valiente. No hubo detenciones, pero agentes viales comentan que Gánem anda buscando afanosamente al agente de tránsito que le ocasionó tal disgusto a su papi.
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A más de quince días de que lo mandaron a ocupar la silla de lo que fue la Secretaría de Desarrollo Regional, allá por el edificio Coahuila, nadie sabe a ciencia cierta cual es la función que realizará Gabriel Calvillo Ceniceros, como representante del Gobernador en La Laguna. Mientras que algunos dicen que cobrará en la nómina estatal por cortar listones de inauguración, presidir honores a la bandera los lunes en alguna escuela o asistir a la celebración de aniversario de algún organismo colegiado, otros dicen que no servirá ni de “bombero”. Son muchos los problemas que hay en la localidad, los cuales son ignorados por varias dependencias estatales, cuyos titulares paracen que les da roña venir a Torreón y optan por hacer que la virgen les habla y así no resolver nada. Cuentan nuestros subagentes que en este escenario a don Gabriel no se le ve la capacidad, ni el carácter para resolver el problema del fuerte pasivo con constructores que tiene el Estado, tampoco el tema de las obras dejadas a medias, la falta de agua en Mieleras y la polémica por el proyecto “encantado” de la Gran Plaza que al paso que va, no estará lista ni para la elección del año entrante. Por lo pronto llama mucho la atención que en las visitas de Don Rubén a Torreón, nadie se acuerda del buen Calvillo. Como si no existiera, al igual que el interés del Estado por los problemas de la ciudad.
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En donde las cosas están que arden literalmente, a pesar de que tienen mucho agua, es en el Simas donde se desarrolla tremenda lucha sorda entre los grupos que de ahí viven y cuya prioridad son las campañas electorales, por lo que tienen al organismo prácticamente “ botado”. Así a nadie le importa que las industrias de Mieleras y Ferropuerto carezcan de agua, que el Simas ocupe el primer lugar en quejas ciudadanas, que los empleados trabajen con las uñas para arreglar las fugas de agua y drenaje por la falta de material, ya que Don Omar Morales, gerente Administrativo, y el Contralor Mario Cepeda prefieren andar en las campañas electorales antes que a ponerse a trabajar para solucionar los graves problemas que enfrenta el organismo en el orden financiero y la falta de agua que afecta a decenas de colonias, sobre todo en la parte sur oriente de la ciudad como resultado del desorden que hay en la paramunicipal.