Sebastian Vettel obtuvo la pole position para el Gran Premio de Estados Unidos al marcar buen ritmo durante la clasificación. (EFE)
Sebastian Vettel consiguió ayer la pole del Gran Premio de Estados Unidos y se ubicó en una posición perfecta para conquistar hoy domingo su tercer campeonato mundial consecutivo de la Fórmula Uno.
El piloto alemán de Red Bull fue el más veloz en las tres sesiones de práctica y volvió a dominar la clasificación con una vuelta de 1 minuto, 35.657 segundos en el nuevo Circuito de las Américas.
Fernando Alonso, el piloto de Ferrari que marcha segundo en el campeonato a 10 puntos de Vettel, se clasificó noveno.
Si Vettel gana hoy, el español tiene que cruzar la meta entre los cuatro primeros para que el campeonato se decida en la última carrera la próxima semana en Sao Paulo.
Lewis Hamilton (McLaren) acompañará a Vettel en la primera fila de la parrilla, seguido por Mark Webber (Red Bull) y Romain Grosjean (Lotus).
Kimi Raikkonen (Lotus), tercero en el campeonato, largará quinto. El venezolano Pastor Maldonado (Williams) se clasificó décimo, y el mexicano Sergio Pérez (Sauber) arrancará decimoquinto.
Vettel está al borde de hacer historia. Sería apenas el tercer piloto -y el más joven- en ganar tres campeonatos consecutivos, sumándose al argentino Juan Manuel Fangio y al alemán Michael Schumacher.
Debutó en la Fórmula Uno, precisamente en un Gran Premio de Estados Unidos, en el 2007 a la edad de 17 años. Ahora, con 25 años, parece listo para entreverarse en la elite.
Vettel evitó decir nada que indicase exceso de confianza sobre sus posibilidades de ganar otro título. Hace dos semanas, una penalización le forzó a arrancar en último lugar en Abu Dhabi, antes de finalizar tercero en una carrera llega de colisiones.
"Estoy muy contento con el resultado en la clasificación, pero nadie anotó puntos aún", dijo. "Vimos en la última carrera lo pronto que cambian las cosas. La mejor estrategia es concentrarse y hacer lo mejor posible".
Pero el sonriente alemán claramente se siente cómodo en Estados Unidos y no tuvo problemas conduciendo en el flamante Circuito de las Américas, construido específicamente para el regreso de la Fórmula Uno al país luego de una ausencia de cinco años.