Viaja Papa Benedicto XVI blindado
Por: Irene Savio/ Roma, Italia / Agencia Reforma.
Así como el Presidente de EU, Barack Obama, tiene su “bestia”, Benedicto XVI posee su Papamóvil con blindaje B8.
El vehículo del Pontífice resiste ataques con armas de fuego y pequeñas explosiones externas.
Construido por la empresa alemana Mercedes Benz y modificado para satisfacer las necesidades de Benedicto XVI, el vehículo es cerrado aunque consta de una especial cúpula acristalada, que deja entrever el Papa y lo protege de eventuales disparos de armas de fuego y de los efectos de explosiones de artefactos.
Tales medidas de seguridad se han hecho necesarias tras el atentado contra Juan Pablo II en 1981, cuando el turco Ali Agca intentó asesinar al difunto Papa polaco mientras éste se hallaba en la Plaza San Pedro a bordo de un Papamóvil de techo descubierto, una Fiat Campagnola.
Lejos queda, por lo tanto, la época del vehículo que Juan Pablo II usó en su viaje a México en 1979, que era un camión DINA tipo 532 sin toldo, con 21 lugares, y que actualmente está siendo custodiado por la Arquidiócesis de Puebla.
Al contrario, el Papamóvil blindado que Benedicto XVI usará en México, uno de los dos que El Vaticano posee, es un vehículo Mercedes Clase ML 450, equipado con aire condicionado y con capacidad para tres personas.
Matriculado SCV1 y de color blanco perla, el vehículo puede ser maniobrado únicamente desde su interior, una tarea de la que, en general, se encarga el secretario del Papa, el alemán Georg Gaenswein. Como máximo, se puede mover a una velocidad de 100 kilómetros la hora.
Cuando el Pontífice está en el Papamóvil se le colocan dos banderas en la parte trasera del vehículo, a la altura de los dos faroles. Dichas banderas están decoradas con el estandarte y los colores amarillo y blanco del Vaticano.
La relación entre la firma alemana Mercedes-Benz, que donó los Pamóviles, y la Santa Sede comenzó en 1930 durante el gobierno de Pío XI, ya que él recibió como regalo uno de los mejores coches de ese momento, el modelo Nürburg 460.
Posteriormente, todos los Papas que siguieron, Juan XXIII, Pablo VI y Juan Pablo II, también usaron coches de la misma marca, algo que sólo en pocas ocasiones fueron alternando con la utilización de vehículos de otras marcas, como el Fiat italiano.
El ángel de Benedicto XVI
Roma, Italia.- Sus ayudantes calculan matemáticamente el tiempo que necesita para cada cita durante la jornada. Entre parada y parada, él atiende a cardenales, despacha a ministros y, en medio de ello, da órdenes a la selecta plantilla de agentes de élite que tiene a cargo para garantizar la seguridad de El Vaticano y de Benedicto XVI, a quien acompañará a México.
El italiano Domenico Giani, jefe de Gendarmería vaticana desde 2006, no encaja con el perfil del espía tradicional. Para empezar, ve lo suyo como una misión que trasciende de su currículum profesional, a pesar de haber sido oficial de la Policía Fiscal italiana y miembro de los Servicios Secretos italianos hasta 1999, año en el que ingresó en el cuerpo de seguridad de la Santa Sede.
Giani, además de estar casado y de tener 2 hijos, es un católico ferviente, algo que debe conciliar con el estar a disposición las 24 horas los 365 días del año para atender cualquier petición sobre la seguridad de El Vaticano y, en especial, sobre el Papa.
Esto se debe a que, en concreto, dependen de él el Departamento Antisabotajes de la Santa Sede, que se dedica a hacer frente a posibles actividades terroristas, y el Grupo de Intervenciones Rápidas (GIR), que interviene en los casos de alto riesgo y está en contacto con la Interpol.
Es por ello que, durante los desplazamientos del Papa fuera del Vaticano, como su viaje a México, Giani es el máximo responsable del restringido grupo de guardaespaldas que no se despegan de Benedicto XVI, dos guardias suizos y cuatro o cinco agentes de la Gendarmería.
La relación entre este soldado de 49 años de edad y el Pontífice es tan cercana que el protocolo prevé que duerma en una habitación cercana a la de Benedicto durante los traslados de éste y que lo acompañe en todo momento.
Asimismo, Giani se encarga de inspeccionar meses antes los sitios a los que viajará el Papa y establecer los contactos con las fuerzas de seguridad locales, las cuales cooperan en las tareas de protección del Pontífice y de su entorno.