Hoy es Domingo de Pascua, día en que recordamos la resurrección de nuestro salvador.
Después de haber gozado de unos preciosos días de asueto con motivo de la Semana Santa y esperando que estos días hayan sido provechosos en todos los aspectos desde haber disfrutado de una grata convivencia con la familia hasta haber puesto en orden muchas cosas comunes que por falta de tiempo vamos rezagando pero lo más importante es haber puesto en orden nuestra mente y nuestras ideas dejando a un lado las preocupaciones que debilitan nuestra salud física y mental.
Deseo de todo corazón que estos días de descanso nos hayan permitido hacer un alto en el camino para volver a nuestras actividades cotidianas renovados, llenos de fe, entusiasmo, pasión, energía y paz interior capaz de permitir que surja desde el fondo de nuestro ser esa maravillosa criatura que llevamos dentro, algo así como nacer de nuevo y que mejor que a partir de esta pascua renacer con todos los talentos que dios nos otorgó para ser exitosos y felices en esta vida para el bien propio, de la familia y la sociedad.
A continuación este pensamiento hermoso que seguramente será muy útil en nuestras vidas si lo ponemos en práctica cotidianamente.
(Autor desconocido)
Prométete a ti mismo:
Ser tan fuerte que nada pueda perturbar tu paz interior.
Hablar de salud, felicidad y prosperidad, con todas las personas que conozcas.
Lograr que todos tus amigos sientan que hay algo valioso en ellos.
Mirar el lado luminoso de todas las cosas y hacer que tu optimismo se vuelva realidad.
Pensar sólo en lo mejor, trabajar sólo por lo mejor y esperar sólo lo mejor.
Ser tan entusiasta respecto al triunfo de los otros como del propio.
Olvidar los errores del pasado y concentrarte en los grandes logros del futuro.
Tener siempre un semblante alegre y dar una sonrisa a cada criatura viviente con la que te encuentres.
Invertir tanto tiempo en tu mejoramiento que no tengas tiempo para criticar a los demás.
Ser muy grande para lamentarte, muy noble para enojarte y muy feliz para preocuparte.
Pensar bien de ti mismo y proclamarlo al mundo, no en voz alta pero sí con hechos concretos.
Vivir en la fe de que todo mundo está de tu lado mientras seas fiel a lo mejor que hay en ti mismo.
Tomado del libro "La Llave" del autor Joe Vitale.
"COMUNICAR ES SERVIR"
