Siria . Un grupo de rebeldes sirios en una camioneta reconoce que la lucha contra el gobierno se ha intensificado. El pasado martes los cascos azules abandonaron la zona debido al incremento de violencia.
La violencia en Siria se ha agravado desde un fallido acuerdo de cese de fuego en abril, y el derramamiento de sangre parece estar tomando un peligroso cariz sectario, advirtieron las Naciones Unidas .
Los investigadores concluyeron que las fuerzas del gobierno sirio podrían ser las responsables de haber matado a más de 100 civiles en el pueblo de Houla el mes pasado.
Las conclusiones, que fueron presentadas al organismo de derechos humanos de la ONU, podrían sentar las bases para juzgar supuestos crímenes de lesa humanidad o crímenes de guerra en Siria.
Reflejando una sensación de urgencia, altos diplomáticos dijeron que las potencias mundiales se proponen reunirse el sábado en Ginebra en un intento por poner fin a la matanza. La secretaria de Estado norteamericana, Hillary Rodham Clinton, y el canciller ruso Serguei Lavrov, participarán con otros altos funcionarios de naciones del Consejo de Seguridad y posiblemente los países vecinos de Siria.
Los activistas dijeron que más de 14 mil personas han muerto desde que comenzó el levantamiento contra el régimen del presidente Bashar Assad en marzo del año pasado.
CULPAN A LEALES
El enviado adjunto de la ONU para Siria, Jean-Marie Guehenno, dijo al consejo de Derechos Humanos de la ONU que la violencia en Siria "ha igualado o aun sobrepasado" los niveles presenciados antes del acuerdo de cese de fuego del 12 de abril y que un plan de paz de seis puntos negociado por su superior, el enviado de la Liga Arabe y la ONU Kofi Annan, "claramente no es implementado".
Mientras tanto, una investigación de la ONU sobre la matanza en el pueblo de Houla concluyó que fuerzas leales al gobierno "pueden haber sido responsables" de muchas de las muertes.
SE INCLINAN A FAVOR DE REBELDES
El informe de expertos sobre derechos humanos designados por la Organziación de las Nacones Unidas dice que los militares o fuerzas progubernamentales conocidas como "shabiha" tuvieron mejor acceso al pueblo de Houla durante la masacre de mayo. Los residentes se inclinan en favor de la oposición y la mayoría de las víctimas fue de mujeres y niños masacrados en sus hogares, precisó.
"El modo en que se ejecutaron estas matanzas semeja el que se documentó previa y reiteradamente en las cometidas por el gobierno", dijo el titular del equipo de expertos, el profesor y diplomático brasileño Paulo Sergio Pinheiro, al organismo de derechos humanos de la ONU en Ginebra.
Sin embargo, agregó que el veredicto final sobre la responsabilidad de la matanza requiere mayor investigación por parte de su equipo.
Atacan televisora, mueren tres periodistas
Tres periodistas y cuatro guardias de seguridad murieron ayer miércoles en el asalto a la sede de la televisión siria progubernamental Al Ikhbariya, de cuya autoría Damasco responsabilizó a supuestos terroristas mientras los rebeldes apuntaron a desertores del régimen.
Además de las víctimas mortales, otras nueve personas resultaron heridas y siete más fueron secuestradas en el ataque, que comenzó a las 04:30 hora local (01:30 GMT) contra el edificio en el que se ubica el citado canal, en la zona de Jan al Shih, 35 kilómetros al suroeste de la capital.
Según el Gobierno sirio, "un grupo terrorista armado" perpetró el ataque contra la emisora, donde supuestamente asesinó a las víctimas e hizo estallar artefactos explosivos.
La televisión oficial mostró imágenes de la sede, destrozada por las explosiones con varias paredes derruidas y otras en pie que presentaban impacto de balas.
El ministro sirio de Información, Omran al Zubi, calificó el ataque como "la peor masacre contra la prensa y la libertad de expresión", prometió que este suceso no quedará impune y aseguró que la transmisión del canal por satélite continuará. (EFE)
No atacará
El primer ministro de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, rechazó que su país tenga alguna intención de atacar a Siria en respuesta al derribo de un avión militar turco por parte de las fuerzas sirias, dejando a sus dos tripulantes desaparecidos.
"En cuanto a Turquía, no tenemos ninguna intención de atacar a Siria", dijo Erdogan, durante una ceremonia militar en Ankara. Sin embargo, en un discurso ante los diputados de su partido Justicia y Desarrollo (AKP, islamista), el primer ministro advirtió que Turquía responderá "en tiempo oportuno" y con "determinación" si vuelve a haber una agresión siria. "Cualquier elemento militar procedente de Siria que represente un riesgo y un peligro de seguridad para la frontera turca será considerado un objetivo militar", afirmó Erdogan, quien calificó al presidente sirio Bashar Al Assad como un "dictador sanguinario".