"Yo no sé cómo sobreviví el segundo año, la verdad, uno pasa tanto tiempo en el hospital, medio duerme, medio come, medio vive. Uno no sabe cómo lo hace, pero sobrevive", comenta una médico de 30 años que hace cuatro empezó la residencia en la especialidad de Neurocirugía en un hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS).
Ahora su sobrevivencia en esta carrera no depende de su fuerza de voluntad, sino de la recomendación que emita la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) sobre la queja que ella y otros médicos residentes interpusieron en ese organismo manifestando los abusos que padecían.
En los cuatro años que llevaba, de seis que debe cubrir para obtener el título de neurocirujana, la guardia de servicio más larga que llegó a hacer fue de 72 horas.
Sin embargo, recuerda el caso de un compañero que estuvo en servicio durante siete días seguidos.
"Cuando nos llegaban a dejar de castigo era porque no cumplíamos con trabajo que teníamos que hacer en la guardia, pero no todo dependía de nosotros porque, por ejemplo, si un paciente no se operaba debido a que no había quirófano disponible, nos teníamos que quedar hasta que se pudiera operar, así fueran días", narra.
"En otras ocasiones, es cuestión del jefe de guardias del equipo al que llegas, hay veces que si le caes mal, ni modo, te buscaba cosas para dejarte de guardia", asegura la joven médico.
Dentro de la "normalidad" en la realización de residencias médicas se encuentran los abusos cometidos por residentes de quinto o sexto año contra los que están en sus primeros años de formación.
"Hay quienes se pasan de listos y creen que la residencia es su pequeño mundo para ejercer el poder", considera.
También es natural que ningún residente alce la voz para denunciar un abuso.
"Llega un momento en que aceptas todo, porque tienes miedo a perder todo, ves todos los años que has sacrificado e invertido y aceptas muchas muchas cuestiones así. Dejas que te aplasten, que te hagan trizas", concluye la joven que prefiere omitir sus datos personales porque está en espera de la resolución de la CNDH respecto a su caso.