La Cámara de Diputados acumula en sus jardines automóviles en desuso, después de haber renovado la flotilla con 130 vehículos Toyota tipo Corolla, contratados en arrendamiento.
Al concluir el canje, los cerca de 90 automóviles tipo Sentra y Optra que entregaron legisladores y grupos parlamentarios están ahora formados en hileras en la parte trasera del edificio "D" de San Lázaro. También se encuentran ahí cuatro autos tipo Cruze 2012, los más recientes que compró la Cámara de Diputados en la pasada legislatura.
Varios legisladores entregaron los vehículos con abolladuras y raspones, y golpes en puertas, pero hay otros en buenas condiciones de pintura, vestiduras y tapetes.
El 3 de febrero pasado, se dio a conocer que la Cámara de Diputados adquirió 130 autos bajo un esquema de arrendamiento, con el argumento de que la flotilla existente se encontraba en malas condiciones y era obsoleta.
Lo anterior, a pesar de que los grupos parlamentarios reportaron pocos meses antes que las unidades que tenían signadas estaban, en su mayoría, en buenas condiciones.
Al justificar la adquisición de los nuevos vehículos, con un costo de 57.3 millones de pesos, el Comité de Administración de la Cámara Baja indicó que 98 de las 224 unidades de las que se disponía entonces generaban gastos recurrentes de mantenimiento preventivo y correctivo, lo que hacía incosteable su operación.
Con el arrendamiento de los 130 vehículos Corolla, destacó, se ahorrarían recursos de mantenimiento, derechos, impuestos, seguros de cobertura amplia y verificaciones.
