León y Pumas empataron a cero en el Olímpico Universitario ayer la capital. (Jam Media)
También con bostezos se anda el camino a la Liguilla. Pumas lo hace a la perfección y da motivos para odiar al futbol, porque lo hace ver nefasto. Aburre hasta al más entusiasta y su casa se ha convertido en un somnífero perfecto, pero se mantiene entre los 8 primeros del Clausura 2013.
Ayer fue difícil despertar a los seguidores auriazules con un 0-0 que se confirmó hasta el final. No había motivo, ni pretextos para que el letargo desapareciera en los presentes en el estadio de CU.
Dormir fue la mejor opción. Después de todo era domingo, 12 del día y el clima se prestaba para una "pestañita" ante la mediocridad futbolística de Pumas y León. Sólo "La Rebel" con sus cantos trataba de amenizar la modorra generada entre auriazules y León, aunque siempre fue más el aburrimiento vivido bajo el calor de CU.
Toques intrascendentes de uno y otro equipos que causaban sopor. Llegadas sin mucha punzada y un concierto de pifias en pases de rutina que terminaban en un somnífero empate.
Las fieras presentes en el césped no lo son tanto en su juego. Están muy lejos de crear espectáculo y alegrar a sus fans balompédicos. Si alguien se atrevía a despertar en el Olímpico, sólo era para lanzar alguna recriminación o una mentada hacia los 22 en el campo. Sin embargo, con el punto conseguido ayer, León aseguró su permanencia en la Primera División.