Accidentes. Son la causa por la que decenas de postes han sido derribados.
Alrededor de 50 arbotantes han desaparecido de la autopista Torreón- San Pedro, así como del Periférico Raúl López Sánchez, a causa de accidentes automovilísticos.
El daño patrimonial en perjuicio del municipio se estima en alrededor de 7 millones de pesos.
Adicionalmente, se han dañado las lámparas, cables, así como subestaciones eléctricas de esas mismas estructuras, según el director de Servicios Públicos, David Fernández Hernández.
Dijo que aparte del presupuesto de 35 millones solicitado este año para el alumbrado público, "se pidieron los 7 millones de pesos para reponer los arbotantes derribados y que hubiera mayor luminosidad en esas importantes vialidades, pero no nos llegó el recurso".
Además de la falta de luminarias tanto en la autopista Torreón-San Pedro como en el Periférico, son de las vialidades más descuidadas de la ciudad en sus áreas verdes, llenas de basura y secas.
También registran una fuerte carga vehicular, doméstica y del transporte público a causa del crecimiento habitacional hacia la parte norte de la ciudad.
En la autopista, en 2010 se plantaron 150 palmas y se colocó parte de un sistema de riego que quedó incompleto. De ese año a la fecha, de dichas especies, quedan rastros quemados.
Por lo que respecta al Periférico, fue el eje de un proyecto denominado "Paisajismo Urbano", desarrollado en varios bulevares y calzadas en el que la anterior administración invirtió 27 mdp.
Aunque se plantaron especies propias de climas secos, no sobrevivieron al abandono.
Sólo cintas
En algunas de las bases donde estuvieron dichos arbotantes, se han colocado cintas amarillas a manera de precaución para automovilistas y peatones.