El ministro israelí de Asuntos Estratégicos, Yuval Steinitz, indicó hoy que si se concreta la propuesta rusa de tomar control y destruir el arsenal químico de Siría, sería una forma de terminar con la actual tragedia que vive éste país.
Advirtió que no se puede afirmar que Israel confía plenamente en esa propuesta, pero en declaraciones a la Radio del Ejército este jueves, reiteró que de darse sería una manera de terminar también con una amenaza.
La posición de Steinitz, que refrenda la del primer ministro israelí Benjamín Netanyahu, coincidió con la circulación de un artículo del presidente ruso Vladimir Putin en el cual llama a Washington a regresar al camino de la civilizada diplomacia y la política en esta crisis.
La víspera Netanyahu fijó la posición israelí sobre la propuesta rusa respecto al arsenal químico sirio, que comenzará a ser discutida este jueves en Ginebra, al señalar que es necesario asegurarse que esas armas serán desmanteladas y quien las use pagaría un precio.
El ministro israelí de Asuntos Estratégicos añadió que Moscú debe de garantizar que Siria quede por completo limpia de armas químicas.
La posición israelí se acercó a la que expresó la Liga Arabe (LA) en el sentido de considerar con seriedad la propuesta de Moscú, pues no hay solución militar a la crisis.
Mientras crece el número de quienes respaldan la vía de acción sugerida por Moscú, la oposición armada siria mantiene su rechazo bajo el argumento de que la solución verdadera seguirá a la salida del poder del presidente Bashar al Assad.
Abdel Jabbar al Oqaidi, comandante del Ejercitó Libre Sirio, dijo que esa propuesta puede servir a Israel pero no al pueblo sirio, y añadió que se trata de un "acuerdo sucio".
En la cita Kerry-Lavrov de este jueves, Estados Unidos buscará asegurarse de que la solución rusa es verificable, y dejará en claro que junto con sus aliados, espera castigo al gobierno sirio si no cumple, adelantó The Washington Post.
