Por causas que hasta el momento se ignoran, un hombre de 61 años, decidió quitarse la vida en Cuencamé.
La madrugada de ayer, el agente del Ministerio Público con asiento en Cuencamé, tomó conocimiento de la muerte de Esteban Ramírez, de 61 años, quien presentó una herida de bala en la cabeza.
A un costado del cadáver, se localizó un arma de fuego calibre 38 súper con la que presuntamente se suicidó.
Tras dar fe de los hechos, el representante social de la Fiscalía General del Estado ordenó que el cuerpo fuera trasladado al anfiteatro del Servicio Médico Forense de Durango para la práctica de la necropsia.
El arma fue asegurada para los estudios periciales.
Los familiares de Esteban declararon ante las autoridades que desconocían el motivo de la terrible decisión que tomó, ya que en días anteriores no se percataron que mostrara alguna actitud fuera de lo normal.
