Inundación. Los costados de la carretera libre a Saltillo, por Congregación Hidalgo, se inundaron.
Las roban
Fernando Reyes, juez civil de Congregación Hidalgo, dijo que el problema sería fácil de resolver de haber contado con las compuertas, pero que éstas fueron robadas.
Con costales
Ante la falta de compuertas fueron colocados sacos para controlar el agua en el canal de Flor de Mayo, donde pueden verse víboras de cascabel flotando en las aguas.
Una inundación ocasionó alarma entre los ciudadanos la mañana de ayer y requirió la coordinación de las autoridades federales, estatales y municipales luego de que el agua que corre por el canal contiguo a la carretera de Congregación Hidalgo salió de su cauce hacia el área conocida como Las Meloneras, en el entronque con la carretera libre a Saltillo, cuyos costados se inundaron por completo y redujeron la vía.
Cuarenta mil litros por segundo de agua corrían durante la madrugada del jueves por el canal, luego bajó a 20 mil litros.
De crecer el río Aguanaval, cuya agua corre por este canal, inundaría Congregación Hidalgo, uno de los centros de mayor población de Matamoros.
Dos factores provocaron la inundación; el primero es que faltan varias compuertas en el ejido Flor de Mayo (que es el canal que conduce el agua hasta Congregación Hidalgo), debido a que fueron robadas y no habían sido repuestas, situación que no fue prevista por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Otro factor determinante fue que los ejidatarios también colocaron bordos para desviar el agua que naturalmente correría hacia otra área y así aprovecharla para el riego de sus parcelas que equivale a 800 hectáreas.
No obstante, esta maniobra provocó que la situación se saliera de control desde la noche del miércoles y madrugada del jueves.
Personal de la Conagua, Protección Civil del Estado, Protección Civil Municipal, la Policía Estatal y el alcalde de Matamoros Guillermo del Real, realizaron recorridos por todas las zonas afectadas.
Humberto Rodríguez, coordinador de Protección Civil del Estado, acudió al lugar y dijo que la creciente se salió de control.
"Si hay necesidad de que esta agua siga su cauce normal por el río Aguanaval y se deje de meter por las zonas de los canales de riego, así será", dijo Rodríguez, quien señaló que se tendrá que realizar un monitoreo sobre la situación del río en Zacatecas.
El alcalde Guillermo del Real dijo que no permitirá acciones por parte de los ejidatarios que de forma irresponsable puedan poner en riesgo a la población y que se trabajará con la Conagua.
