El río Aguanaval se desbordó ayer tras alcanzar un caudal máximo de 760 metros cúbicos por segundo, más del doble del registrado en los primeros días de la avenida, y dejó incomunicados a los poblados de Congregación Hidalgo y Petronilas y a varios ejidos.
El desbordamiento no provocó inundaciones o daños en las viviendas de las poblaciones aisladas, donde la mayoría de los pobladores ya había sido evacuada.
La creciente cortó la carretera que conecta a Matamoros con Congregación Hidalgo y que conecta a ejidos como El Refugio, El Barreal, San Antonio del Alto, Gilita y Buenavista, en Matamoros y Viesca.
También se cortó el camino que lleva a Petronilas, que prácticamente se convirtió en una isla.
Alrededor de 1,150 personas permanecen en cinco albergues, dos en Matamoros, dos en Viesca y uno en Torreón, informó la Secretaría de Desarrollo Social del Estado.
Personal del Ejército, la Policía Federal, el gobierno de Coahuila y la Conagua apoyaron en los traslados y en la protección de los bordos.
Durante la noche del miércoles, con el aumento del caudal, el bordo de la margen derecha cedió a la altura de Petronilas, inundando tierras del ejido.
El jueves en la madrugada el agua rebasó el bordo de la margen izquierda a la altura de Congregación Hidalgo, flujo que fue controlado de inmediato para evitar la inundación del poblado.
La Comisión Nacional del Agua (Conagua) informó que el caudal alcanzó un máximo de 760 metros cúbicos por segundo (m3/s) entre miércoles y jueves, cuando a principios de la semana el gasto era de poco más de 300 m3/s.
Ayer por la tarde el caudal iba a la baja, con un registro de 422 m3/s en la Flor de Jimulco. La Conagua pronostica una baja en las lluvias en Zacatecas, donde está la cuenca alta del Aguanaval.
Inundado. El puente que lleva al ejido El Dólar fue rebasado por el nivel del río Aguanaval en su paso a la Laguna de Viesca.