Una intervención militar en Siria provocaría una conflagración mayor donde la solución política estaría fuera del alcance de la comunidad internacional, afirmó hoy la Comisión de Investigación sobre Siria.
"Hay una necesidad urgente de un cese de hostilidades y el regreso a las negociaciones, para llegar a una solución política'' dijo la Comisión que encabeza el brasileño Paulo Pinheiro en un comunicado.
"Elegir a la acción militar en Siria no sólo intensificará el sufrimiento dentro del país, sino que también servirá para mantener esa solución fuera de nuestro alcance colectivo", advirtió.
Esta Comisión fue designada por el Consejo de Derechos Humanos de la ONU para documentar los crímenes en Siria. Es distinta a la nombrada por el secretario general de Naciones Unidas Ban Ki-moon.
El único mandato de ese otro grupo es el de investigar ataques con armas químicas en el contexto del conflicto armado que rebasó ya más de dos años y medio de haber iniciado.
La entidad de Pinheiro agregó que de la militarización mayor del conflicto podrían surgir nuevos actores que provocarían más sufrimiento para la población civil.
El conflicto en Siria ha dado "un giro peligroso", especialmente por el supuesto uso de armas químicas contra la población civil y la amenaza de una intervención militar.
"El fracaso para encontrar una solución política al conflicto no solamente ha profundizado su intransigencia sino se ha ampliado hacia nuevos actores y se han cometido nuevos crímenes antes inimaginables", subrayó la Comisión.
Enfatizó que la mayoría de víctimas de este conflicto ha sido causado por armas convencionales utilizadas en ataques ilegales.
Sin embargo, reconoce que el debate sobre la solución del conflicto ha tomado una nueva urgencia tras el presunto empleo de armas químicas en agosto.
La Comisión expresó su apoyo al llamado de Ban Ki-moon sobre la rendición de cuentas, tanto para llevar ante la justicia a quienes hayan utilizado armas químicas, si se confirma su empleo, como para disuadir a cualquier persona de volver a utilizar "éstos aborrecibles métodos de guerra".
Los expertos encabezados por Pinheiro documentan desde hace más de un año los crímenes y violaciones de derechos humanos en Siria con reportes al Consejo de Derechos Humanos.
