Huellas de la violencia. Patrullaje de la Policía Federal en Aguililla, tras los enfrentamientos en días pasados. En la imagen, una casa que sufrió los daños de las balas de alto calibre.
El gobierno de Estados Unidos ya había advertido en días pasados a sus ciudadanos sobre el escenario de violencia en Michoacán, y señaló como uno de los factores de riesgo la existencia de ataques a las autoridades, como policías y militares en la entidad por parte de "organizaciones criminales trasnacionales", por lo que pidió a sus connacionales "aplazar los viajes no esenciales" a ese territorio.
Así lo difundió el Departamento de Estado de ese país en su más reciente alerta de viajes a México, vigente desde el 12 de julio pasado, en la que incluso indica la presencia del surgimiento de policías comunitarias, como grupos armados que en algunos casos también han sido asociados a organizaciones delictivas.
La advertencia, que sustituyó a la emitida por el gobierno estadounidense en noviembre de 2012 -y que incluye un diagnóstico sobre los riesgos de seguridad de viajar a 20 entidades del territorio mexicano-, coloca a Michoacán como una de las regiones del país que es preferible evitar ante el incremento de la violencia, lo que en menos de 15 días de que se renovó la alerta, ya es una realidad concreta.
El Departamento de Estado había ya señalado como elemento de riesgo la existencia de agresiones contra autoridades.
De acuerdo con el reporte del gobierno de Estados Unidos, en el apartado dedicado a Michoacán, éste indicó a sus ciudadanos que "usted debe aplazar los viajes no esenciales al estado, excepto las ciudades de Morelia y Lázaro Cárdenas, donde se debe tener precaución". Es decir, que incluso en los puntos considerados de menor riesgo, se pidió cautela, y para viajar entre estos puntos se recomendó utilizar la vía aérea y no terrestre.
