Ninguna señal de vida se ha detectado en una zona de minas de oro en un sitio montañoso del Tíbet más de 24 horas después de que un enorme desprendimiento de tierra sepultó a 83 trabajadores, informaron ayer los medios estatales de comunicación de China.
La Televisión Central de China dijo que más de dos mil rescatistas fueron enviados a la localidad de Maizhokunggar en Lhasa para buscar a las personas atrapadas.
Unos dos millones de metros cúbicos de lodo, rocas y escombros se despeñaron en la zona mientras los trabajadores descansaban y el alud cubrió un área de unos cuatro kilómetros cuadrados, indicó ese canal televisivo, conocido por las siglas CCTV.