En turnos. Alumnos de la escuela primaria Ignacio Zaragoza del ejido Jaboncillo se turnan para tener mesabanco en el salón.
La escuela primaria Ignacio Zaragoza del ejido Jaboncillo se encuentra en el olvido por las autoridades municipales y estatales, al parecer por la 'confusión' que existe, debido a su cercanía con el área urbana de Francisco I. Madero.
Mayra María Robles Marentes, presidenta del Comité de Padres de Familia de la escuela Ignacio Zaragoza, solicitó una visita al plantel, ya que aseguran que como padres han hecho hasta lo imposible por mantener las instalaciones en las mejores condiciones para que sus hijos no sufran tantas carencias al estudiar, pero hasta ahora, numerosos alumnos se ven obligados a tomar clase en el suelo.
Integrantes del comité de padres comentaron que en coordinación con la dirección, a cargo de Luis Fernando Rodríguez Trejo, han enviado varios oficios desde el ciclo escolar anterior, al alcalde municipal Cristóbal Marrufo López, así como a la Subdirección de Servicios Educativos local, representada por Antonio Valtierra Limones, pero no ha habido ninguna respuesta.
REPARACIÓN DE MESABANCOS
Ante la falta de atención de las autoridades estatales y municipales, los padres de familia, quienes cuentan con recursos limitados, pues aseguran que perciben un salario menor a los 700 pesos por semana, se organizaron y donaron 10 pesos por alumno al Comité para enviar a reparar 20 mesabancos.
Hasta ahora el panorama resulta poco alentador, ya que los mesabancos serán reparados con respaldos y paletas de otros bancos que ya están más deteriorados.
LA AMPLIA LISTA DE CARENCIAS
Al insuficiente número de mesabancos en la escuela de Jaboncillo se suma la falta de bebederos, el acceso a agua potable para el área del comedor, el mantenimiento de los cañones y los pizarrones electrónicos, los cuales tienen varios años sin funcionar, además de un profesor de educación física.
El comité de padres solicitó también la atención de la Jurisdicción Sanitaria VII, debido a que hace varios meses robaron la tubería que abastecía la línea de agua potable al único bebedero de la escuela, y la dirección ante la falta de recursos, sólo instaló una manguera en la deficiente área verde con la que cuentan, la cual es tomada del piso por los niños, para poder hidratarse.
La instalación de la manguera fue una medida desesperada de la dirección y los maestros, ya que la toma del agua potable estaba al ras de la tierra, por lo que los menores tienen que hincarse y pegarse casi al suelo para tomar agua.
FALTA MATERIAL PARA LOS MAESTROS
Pero no sólo los alumnos carecen de mobiliario, tampoco hay sillas y escritorios para los profesores.
Actualmente, los maestros cuentan con una silla y un escritorio (mesa de comedor) por donación de los padres, incluso hubo maestros que decidieron llevar una silla de su casa.
Otra situación, que pidieron los padres, fue que la Jurisdicción Sanitaria VII y la Comisión de Salud del Cabildo Municipal revisara la preparación de los alimentos del desayuno escolar.
Si bien es cierto, el desayuno tiene un costo bajo, de 34 pesos por semana, en la comunidad de Jaboncillo no todos los padres de los más de 150 niños, pueden hacer dicha aportación, por lo que el personal encargado del comedor de la primaria Zaragoza, tiene que preparar a veces los alimentos con el agua que sale de la manguera, en lugar de que se sigan comprando los garrafones de agua potable que antes se adquirían.
El día que El Siglo de Torreón visitó esta primaria, los estudiantes de tercer grado no tuvieron clases, y apenas tomaron algunas lecciones en el exterior, debido a que el profesor se dedicó a reparar las ventanas, ya que éstas por seguridad fueron soldadas. Sin embargo, al no poder abrirse los estudiantes sufrían por el calor, por lo que el profesor las desoldó. El aula de tercero no es la única con las ventanas soldadas.
Es importante mencionar, que la escuela cuenta con un intendente, pero su pago no lo recibe de parte de la Secretaría de Educación Pública del Estado, mucho menos por el municipio, sino por los padres de familia, que de manera quincenal juntan 100 ó 200 pesos para apoyar a quien ayuda a mantener las aulas limpias, sobre todo en donde los estudiantes se ven obligados a tomar sus lecciones en el suelo.
INSEGURIDAD Las ventanas soldadas son parte de las medidas de seguridad que la dirección del plantel tomó para evitar que los amantes de lo ajeno entraran a robar, y es que aseguran los maestros, hubo ocasiones en las que entraban a robar sólo marcadores, resistol y hojas de máquina.
Los padres de familia comentaron que hasta hace un par de semanas pudieron terminar de instalar la luz en todas las aulas, pues en temporada vacacional se robaron todo el cable.
Asimismo, señalaron que han solicitado el apoyo de la Dirección de Seguridad Pública Municipal (DSPM) para dar más rondines en el sector, pero las unidades muy pocas veces circulan por ahí.
Con el arranque de la entrega del programa de Paquetes Escolares del Estado, los padres de familia tenían la esperanza de recibir un poco de ayuda para los estudiantes.
Pero hace apenas unos días recibieron la noticia de que esta institución no estaba contemplada para recibir el apoyo del Estado, ya que está considerada como una primaria del área urbana.
Situación que quisieron aclarar los padres con la Subdirección de Servicios Educativos, pero ahí solo se les dijo que ya no se podía hacer nada, ya que la indicación venía de Saltillo.
La escuela cuenta con dos aulas en donde se contaba con un cañón proyector y un pizarrón electrónico, pero ninguno funciona desde hace varios años, esto porque la dirección no contaba con el recurso suficiente para darle su mantenimiento.
Actualmente, los cañones, ubicados en las aulas de sexto y quinto grado, se encuentran empolvados.
RECONOCEN FALLAS, PERO NO HAY APOYO
En la Subdirección de Servicios Educativos, Valtierra Limones dijo que conocía la situación de la escuela Ignacio Zaragoza y que al inicio del ciclo escolar se había enviado el oficio a la Secretaría de Educación del Estado, pero que no se ha tenido ninguna respuesta para ella, que sólo llegaron al Municipio 200 mesabancos, pero para otras escuelas.