Obra. Ejidatarios de Pueblo Nuevo contemplan suspender las obras de la carretera Durango-Mazatlán al contar con un amparo que se los permite.
Campesinos del ejido Pueblo Nuevo anunciaron que impedirán que se continúe con los trabajos de construcción de la carretera Durango-Mazatlán, esto tras habérseles otorgado un amparo con fecha 13 de febrero del presente año por parte del Juez Segundo del Poder Judicial de la Federación.
En rueda de prensa convocada ayer por la mañana el representante legal de los ejidatarios Ernesto Pérez Virgen aseguró que desde hace tres meses que se les concedió la suspensión por las actos reclamados, que son la reparación de la afectación que se sufrió el ejido en 500 hectáreas por la ejecución de este proyecto carretero.
Dijo que en los últimos meses se ha sido paciente tomando en consideración la importancia que reviste esta obra para el desarrollo de Durango y del país; dijo que no se detuvo la obra, pese a estar en la posibilidad de hacerlo, y se trató de entablar comunicación con autoridades estatales, sin que se haya recibido respuesta alguna sobre las audiencias solicitadas.
Sostuvo que se quiere platicar con el gobernador del estado, para saber de viva voz cómo se va incluir a los campesinos en el progreso que representa la autopista, mismo que en su opinión llegará a todo estado, así como a los sectores económicos. Y ellos no quieren ser excluidos.
Señaló que, entre tanto, con la Dirección local de la SCT se buscó diálogo, y esta instancia prejuzgó, discriminó y satanizó la lucha legal y constitucional al difamar a los ejidatarios señalando que ya se les había pagado todo por las afectaciones al ejido.
Por lo tanto, un grupo de ejidatarios de manera directa irán este día con las compañías españolas y mexicanas que realizan la obra para entregarles una copia del amparo y pedirles de manera pacífica que dejen de trabajar y se retiren del ejido Pueblo Nuevo.
