Pese a que tuvo un hombre más durante casi todo el segundo tiempo, América sufrió de más para amarrar su pase a semifinales. América sufre ante Tigres, pero está en semis
Cómo se ve que la cargada pinta de amarillo crema... Con arbitraje a modo, las Águilas vuelan en el Estadio Azteca y al filo del reglamento avanzan a semifinales del Apertura 2013, tras igualar 1-1 (3-3 global) con Tigres, en duelo dramático, lleno de polémica, a la vieja usanza americanista en lides de Liguilla.
Un claro penalti que "Chiquimarco" Rodríguez no concede a Lucas Lobos en el primer lapso y con las tarjetas más cargadas a la institución regia, contribuyen al éxito amarillo, luego de toparse contra la mejor versión felina en todo el torneo.
Los 49 mil 570 fanáticos que acuden al inmueble sufren de más por asegurar su estadía entre los cuatro invitados a la recta final.
En el arranque del complemento, el América sale más revolucionado y al 52' consigue romper el empate. Lo hace a partir de una escapada de Layún por izquierda, cuyo centro corto a primer poste, es cabeceado con mucha categoría por Raúl Jiménez, quien cruza a Palos, para someterlo.
Para colmo de males, Hugo Ayala, quien estaba amonestado, se gana otra tarjeta y se va expulsado (55'), lo que abre las puertas del éxito a las crecidas Águilas.
Sin embargo, Tigres no se da por vencido y en una descolgada promovida por el arquero Palos, Alan Pulido encuentra mal parada a la zaga local, hace un recorte y el bombazo no puede ser contenido por Muñoz, para igualar 1-1 las acciones (57'), pese a jugar con 10 norteños.
Decidido, el cuadro visitante va por todo en los últimos minutos y al 80', Emanuel Villa conecta un bombazo cruzado que sacude el poste derecho de Muñoz, cuando ya se cantaba el fracaso azulcrema. Minutos después, el delantero requiere salir de cambio, mareado, por lo que es asistido en ambulancia.