Apoyo. Además de las becas mensuales, los padrinos ayudarán con la compra de útiles escolares, zapatos, entre otras cosas que necesitan las niñas.
Se busca disminuir la deserción escolar en la población femenina de comunidades
A través del programa "Por nuestras 100 hermanas de clase" se apadrinó al mismo número de niñas de escasos recursos económicos y sin acceso a ningún programa gubernamental.
Las niñas viven en diferentes comunidades del Cañón de Jimulco y el objetivo del programa es evitar que abandonen sus estudios.
Un grupo de profesionistas se organizó para entregar 100 pesos mensuales a 100 niñas, una cantidad que si bien en la ciudad no representa nada, en una comunidad puede ser la diferencia entre seguir estudiando o dejar de hacerlo.
"Varios profesionistas de Torreón de origen modesto nos organizamos para apadrinar a esas niñas para que no se salgan de la escuela", dijo Rodrigo Fuentes Ávila, diputado local con licencia.