Un grupo de vecinos molestos porque la Policía no les alertó sobre un par de agresiones sexuales cometidas contra menores decidió hacerse cargo del asunto por su cuenta al perseguir a un hombre que se pensó era el atacante, le lanzó rocas y lo dejó con el rostro ensangrentado, informaron el lunes las autoridades en Colorado.
La Policía de la ciudad de Pueblo liberó más tarde al hombre por falta de evidencias, reportó el lunes el periódico The Pueblo Chieftain.
Los habitantes de la zona buscaban al responsable de dos actos sexuales cuando se enteraron de que una persona que se ajustaba a la descripción dada por las autoridades había sido detectada, dijo Alex Pacheco, uno de los persecutores.
El grupo enfrentó al hombre y él corrió.
Las personas lo persiguieron y lo golpearon en el rostro, se acuerdo con Tom Rummel, capitán de la Policía. Los oficiales que llegaron al lugar metieron al individuo a su patrulla y lo trasladaron a la comisaría para interrogarlo. El hombre no sufrió heridas serias.
"El primer oficial que llegó al lugar pidió que se lo llevaran de ahí", dijo Rummel.
Pacheco dijo al diario que los habitantes estaban recorriendo el área buscando al hombre que cometió los delitos sexuales en los últimos meses.
Un incidente involucró el asalto sexual contra una niña dentro de su propia casa. En el otro, las autoridades dijeron que un hombre con la misma descripción se exhibió ante un niño.
La Policía indicó que cerca de media decena de personas se congregó a medida que los residentes se enteraban de la persecución y se sumaban a las acciones.
Rummel agregó que la Policía notificó a los medios de comunicación y colocó avisos en las redes sociales sobre los ataques, pero por ley, las autoridades no están obligadas a notificar a los residentes dado que no ha habido arrestos sobre los casos.
La identidad del agredido no fue revelada porque no se presentaron cargos en su contra. El hombre aceptó proporcionar a los investigadores una muestra de su ADN a fin de ser descartado como sospechoso.
