El Instituto Federal Electoral (IFE) declaró por unanimidad la procedencia constitucional y legal de la reforma estatutaria aprobada por el Partido Acción Nacional (PAN) en su XVII Asamblea Nacional realizada en marzo y agosto pasados, misma que estableció que la elección de su dirigencia será mediante el voto directo de sus militantes.
El último paso para la entrada en vigor de esos cambios es su publicación en el Diario Oficial de la Federación, de no ser impugnada la decisión del IFE ante el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación.
Satisfecho ese paso, anunció el representante del PAN ante el IFE, Rogelio Carbajal, "generaremos reglamentos y renovaremos de inmediato el Consejo Nacional, las dirigencias nacional y estatales".
Al presentar el asunto el consejero electoral Lorenzo Córdova, presidente de la Comisión de Prerrogativas y Partidos recordó que el Pacto por México se propuso crear una nueva Ley de Partidos Políticos y consideró que sería el momento oportuno para incluir a éstos nuevas obligaciones en materia de democracia interna, transparencia y organización.
La reforma estatutaria ameritó la felicitación de la consejera electoral Macarita Elizondo, pues se estableció acciones afirmativas en la integración de los órganos panistas.
Así el Consejo Nacional, Comisión Permanente, Comité Nacional y estatales se integrarán con al menos 40 % de género distinto y hasta alcanzar la paridad.
“Ojalá no fuera sólo deseable sino obligatoriamente pero son acciones afirmativas y un primer paso importante”, dijo la consejera.
También valoró que se incluyan mecanismos internos de solución de controversias cuando los militantes sean privados de sus derechos al interior del partido, figura de "amigable composición" deseable en otros partidos, dijo Elizondo.
- Infundadas, las 8 impugnaciones
Para la aprobación de los cambios estatutarios la Comisión de Prerrogativas analizó 8 impugnaciones promovidas por militantes del PAN, pero las consideró infundadas.
Entre los impugnantes están el operador panista Jorge Arturo Manzanera y Manuel Gómez Morín Martínez del Río, descendiente del fundador del PAN Manuel Gómez Morín.
El primero alegó por lo menos siete razones por las cuales a su juicio es ilegal la reforma estatutaria panista, entre ellas que al emitir a mano alzada -y no mediante cédula y en secreto- su voto, el presidente de la Asamblea, y dirigente nacional del PAN, Gustavo Madero, ejerció "coacción" para dirigir el voto de los delegados.
Objetó además que los cambios no fueron aprobados por las dos terceras partes de cada delegación, que fueron ilegales los acuerdos tomados en la Asamblea que fue interrumpida por falta de quórum (en marzo) y consideró irregular que una Comisión de Evaluación y Mejora creada por el Consejo Nacional, haya propuesto un "proyecto de armonización" de estatutos sin que se haya consultado.
Además advirtió que este documento fue declarado aprobado "por evidente mayoría", sin tomar en cuenta a los escrutadores, además de que no habría sido mayoritaria la aprobación.
En tanto, Gómez Morín alegó que entre la Asamblea de marzo y la de agosto la dirigencia panista hizo una reforma de la reforma por la vía de la Comisión que elaboró el proyecto de armonización estatutaria.
Pero durante el análisis el IFE reconoció que durante la Asamblea se detectaron algunos "vicios" pero fueron subsanados "en la continuación de la misma", en agosto.
También admitió que en agosto fueron votados elementos nuevos, pero corroboró que fueron consultados previamente entre los delegados y luego sometidos y votados válidamente por la Asamblea.
Sobre el voto emitido por Madero, el IFE estableció que como delegado numerario tiene derecho a voto, sin que éste deba ser por cédula, ni diferenciarse del resto de los delegados.
